Sigue el canal de El Día de Valladolid en WhatsApp y entérate de todo lo que ocurre
Valladolid quiere ser la puerta de entrada al enoturismo que llega atraído por las más de 200 bodegas distribuidas por la provincia y sus cinco denominaciones de origen. La Concejalía de Turismo ha puesto en marcha diversos eventos y tiene pendientes grandes proyectos como la ejecución del Centro de la Cultura del Vino.
El Ayuntamiento anuncia nuevos eventos para atraer enoturistas. ¿Es la gran apuesta?
En la elaboración del plan estratégico vimos que el enoturismo es uno de los pilares fundamentales de la oferta de la ciudad. A veces, no es más importante inventar cosas, sino detectar en qué somos competitivos y ofrecerlo de una manera más atractiva, que es lo que intentamos con estas nuevas estrategias. También lo vemos al hacer la promoción internacional: se nos reconoce como territorio gracias, en gran en parte, al vino. En España el turismo gastronómico es una seña de identidad, que nos abre puertas importantes.
¿Eso qué supone en la estrategia para atraer más enoturistas?
En mayo habrá un hito fundamental con el 'Vino+Tapas Valladolid', que une dos conceptos básicos para nosotros. Por un lado, el vino como valor diferencial de la oferta de la ciudad, como esa gran puerta de entrada al mundo del enoturismo, que unimos con lo que mejor sabemos hacer, que son las tapas. Si somos competitivos en vino y en alta gastronomía en miniatura, hacer que todo eso confluya en un solo evento nos va a hacer mucho más diferenciadores de cara a otros destinos.
¿Sustituirá a 'Vino+Valladolid'?
Es la evolución. 'Vino+Valladolid' está unido al Cosquín Rock, es la conexión entre el vino y la música, previo al festival. Hicimos la prueba el año pasado en la Cúpula del Milenio con los podcasts, las catas y el túnel del vino, y vimos que podía crecer más por la acogida que tuvo. Este año lo transformamos para llevarlo a la calle y, además, meterle el contenido de la gastronomía con las tapas. Va a seguir teniendo la misma esencia: será un evento con las cinco DO, habrá podcasts para los más jóvenes y va a tener catas dirigidas, que se celebrarán en la Oficina de Turismo. Y la música será hilo conductor, que es lo que nos lleva al Cosquín.
¿El festival cambia de fecha?
Sí, nos dimos cuenta de que había que modificar la fecha. Cosquín será en verano y la cita enogastronómica tenía más sentido en mayo, después de las fiestas de San Pedro.
¿También está pendiente la inauguración de Valladolid Origen?
Valladolid Origen parte de los planes estratégicos de Turismo, pero está ubicado en un espacio que gestiona la Concejalía de Cultura. Las obras están terminadas, pero ahora habrá que esperar a los siguientes hitos en la apertura.
¿Cuándo empezarán las obras del Centro del Vino?
Los trámites administrativos en un proyecto como este son fundamentales porque avalan todo lo que va a pasar después. Estamos ya en un momento previo, muy cercano, al inicio de las obras. Los trabajos durarán más de un año.
¿Cómo repercute la oferta enoturística de la provincia en la capital? ¿Se pueden mejorar sinergias?
Está repercutiendo positivamente. Las cifras de turismo de 2024 han sido históricas, como más pernoctaciones y visitas. Este enero, además, ha sido el mejor de los últimos años. Y todo esto viene refrendado por el turismo gastronómico. Sabemos que uno de los pilares por los que nos visitan es el vino y las tapas. Ese es el diferencial gastronómico que tiene Valladolid. El territorio es muy importante y estamos en contacto con la Diputación para que todas sus ofertas las podamos ofrecer. Cuando hacemos promoción internacional de enoturismo siempre pensamos en la provincia, es indivisible y es imposible hacer una estrategia de este tipo sin pensar en el territorio.
En ese sentido, la referencia a la que es difícil llegar es la de Rioja. ¿Se fijan en ellos para nuevas iniciativas?
Valladolid, cuando el Centro de la Cultura del Vino sea una realidad, y teniendo en cuenta el potencial del territorio, va a ser la capital del vino más importante de España. El eje Burdeos, Valladolid y Oporto configura, desde el punto de vista mundial, una forma de entender el vino y de ver el vino. La Rioja es un gran productor y un destino enoturístico muy importante, pero podemos competir no solo en calidad, sino también en imagen y en estrategia. Pero, nos vamos a fijar siempre en aquellos que lo hacen bien.
Las DO quieren traer más turistas internacionales. ¿Y la capital?
El año pasado, por primer, las cifras de turismo internacional superaban el 20 por ciento. Eso dice que la promoción que estamos funciona y que tenemos que seguir fijándonos en ese tipo de turista. El valor diferencial que ofrecemos es para grandes mercados, como puede ser el ejemplo de México. Cuando hicimos la promoción allí, nos preguntaban por la Ribera del Duero. Ellos tienen en su cabeza que es el vino con más calidad del mundo y les explicamos dónde está porque muchas veces no ubican el territorio con las marcas. También explicamos que hay otras DO en la provincia.
¿Y tejen más redes?
Sí, hay que sumar el trabajo que vamos a hacer con Madrid, que es el principal destino internacional de España. Nosotros tenemos una conectividad fantástica con la capital y vamos a aprovechar esa sinergia para que en el trabajo que hagamos a partir de ahora en colaboración con el Ayuntamiento, el turismo internacional sea una de las principales referencias.
El turista que viene a la capital de España llega buscando un largo recorrido en su viaje, una larga estancia y nosotros podemos dar ese valor diferencial para que, además, se vaya con la idea de la gastronomía y el vino como una experiencia especial.