La derrota (1-0) del Real Valladolid Promesas en el complicado y menudo campo de la UD Llanera cortó su racha de ocho jornadas consecutivas sumando. Un resultado que "te deja mal sabor de boca", tal y como reconoció Álvaro Rubio tras el encuentro. "Está claro que perder no gusta, pero si es de esta manera bienvenido sea. El equipo ha competido bien ante un rival muy duro en un partido muy duro. Siendo un filial, este tipo de partidos cuesta saber jugarlos y hemos estado a la altura", expresó.

El técnico blanquivioleta explicó que sabían que "el partido iba a ser así", lejos del juego habitual por parte del filial pucelano: "Los chicos me han sorprendido en ese sentido. Estoy súper contento con su actitud. A veces no se puede hacer más aunque quieras porque ellos hacen esto muy bien y hay que elogiarles".

Pese al resultado adverso, Álvaro Rubio insistió en que la idea del Promesas es "ir poco a poco". "Este partido era importante para engancharnos arriba. No ha podido ser, pero el equipo está trabajando bien, cada semana mejora cosas y esto nos va a servir para el futuro. Estamos en un proceso de formación constante y será genial para ellos", finalizó.