Braulio Vázquez y Rubi, si es que se confirma oficialmente el fichaje del técnico catalán, algo que parece hecho desde hace semanas, tienen trabajo por delante. Mucho. Y uno de los principales es buscar delanteros. En plural. Ni uno ni dos. Más. La razón es que el Real Valladolid ahora mismo no tiene ni un solo ariete en nómina.

Las salidas de Guerra, Osorio, Manucho y Larsson han dejado al conjunto blanquivioleta sin referencias en ataque, sin gol.

Guerra ya ha sido presentado como nuevo delantero del Cardiff, donde ha firmado por tres temporadas tras el intento de venta del pasado mercado de invierno. El de Vélez, pichichi con 15 goles esta temporada, se va libre y deja huérfano de gol al Real Valladolid (marcó 73 dianas en sus cuatro campañas como blanquivioleta).

Larsson, a pesar de tener contrato, no seguirá vinculado a la entidad del José Zorrilla debido a una cláusula de su contrato, por la que se le bajaba el sueldo en un 50% p quedaba libre. El mediapunta sueco se quiere quedar fuera de su país y tiene ofertas de Francia e Inglaterra. En su temporada y media en Valladolid anotó tres goles.

Osorio llegó el pasado verano. Se le presentó con un contrato hasta 2016, pero la realidad es que llegaba cedido por un solo año. A pesar de las lesiones y de apenas jugar algo más de 500 (en 16 partidos) ha acabado como segundo máximo anotador, con 4 goles.

Y por último Manucho. El angoleño, tras cinco temporadas en el Real Valladolid -incluida una cedido en Turquía-, tiene muy complicado renovar. En sus cuatro años como blanquivioleta ha marcado 19 goles, destacando los 8 de  la pasada campaña, en la que estuvo a punto de quedarse sin jugar al ser apartado en verano.

Primeros nombres. Sin ni siquiera haberse presentado aún al director deportivo y al entrenador, los primeros nombres ya están encima de la mesa. Mirko Ivanovski, aquel delantero macedonio que juega en el Astra Giurgiu rumano y que en diciembre estuvo a punto de firmar por los blanquivioleta, podría ser una apuesta, aunque interesa al Beitar Jerusalem israelí. La llegada de Braulio podría traer algo de la zona del Valencia y ayer se comentó la opción de una cesión de Vinícius Araújo, aunque hay interés de varios clubes de Primera. El baile continuará.