Fiscalía de Valladolid ha mantenido este viernes su petición de tres años y medio de cárcel para Federico C, el hombre que en abril de 2023 fue interceptado en la calle Arca Real cuando portaba distintas cantidades de droga, entre ellas 2,34 gramos de speed. La versión del autoconsumo alegada por el encausado no ha convencido a la acusadora pública.

Será por tanto la Sección Segunda de lo Penal de la Audiencia Provincial la encargada de elegir entre la citada solicitud condenatoria, que incluye el pago de una multa de 500 euros, o la absolución que ha reclamado el abogado de la defensa.

El defensor, además de la escasa cuantía de la mercancía incautada que haría creíble ese supuesto autoconsumo, ha recordado que su cliente es toxicómano habitual, como así acredita el informe forense y la prueba del cabello, y ha destacado el hecho de que los agentes no hallaran en su vehículo instrumentos para el pesaje de la mercancía.

El propio acusado, durante su declaración en sala, ha asegurado que tanto el speed intervenido como los 11,81 de marihuana y 4,24 de hachís que portaba en el momento de la detención, practicada el 29 de abril de 2023 en la calle Arca Real, eran para consumo propio.

De hecho, uno de los agentes de la Policía Nacional que participó en su detención ha reconocido que la misma se produjo de forma "casual", sin que el acusado estuviera siendo sometido a investigación y seguimiento alguno, y que Federico C. justificó la tenencia de las sustancias en que las mismas eran para cubrir su adicción.

"Nos llamó la atención que su vehículo estuviera mal aparcado", ha explicado uno de los funcionarios, quien, en declaraciones recogidas por Europa Press, ha añadido que fue entonces cuando al identificar a su conductor se percataron de un fuerte olor a marihuana que emanaba el interior del turismo.

Pese a ello, la fiscal del caso sostiene que la mercancía intervenida estaba preordenada al tráfico ya que la cuantía de la misma "excede" la cantidad fijada para el consumo diario, a lo que ha añadido el detalle de que el acusado llevaba una cartera vacía y, sin embargo, 60 euros repartidos en billetes de diez y cinco euros en uno de los bolsillos del pantalón.