Victoria Lafora

Victoria Lafora


Entre Cataluña y Europa

02/06/2024

A una semana de las elecciones europeas, los partidos pelean hasta el último voto entre Cataluña y el fango. Y, de fondo, la amnistía, que podría no entrar en vigor hasta después de los comicios. En Moncloa temen el castigo en las urnas por la aprobación de un "olvido" de los delitos del "procés" concedido a cambio de la investidura de Sánchez. Y más cuando, incluso, el presidente de Castilla la Mancha, Emiliano Garcia Page, se ha sumado a sus colegas del PP para presentar un recurso de inconstitucionalidad contra la amnistía. En Ferraz hacen como si no vieran, y Sánchez aguanta con ironía los bocinazos que acompañaron su último mitin. "Fango" se ha convertido en la palabra de moda en la política nacional. Seguramente, cerrados en sí mismos, no se percatan de que, con tanto fango, quien se siente enfangada es la ciudadanía.

El PP y la ultraderecha, convencidos de que una victoria en Europa es una puerta abierta a la Moncloa, van a agotar los adjetivos peyorativos contra el perdón a los líderes del independentismo catalán. Los cuales, por cierto, han recuperado la sintonía y acuden juntos a la tribuna del Congreso para abrazarse con gran alborozo y declarar, al unísono, que esto no es más que el primer paso y que "ahora a por el referéndum" Puigdemont, nervioso, reclama la entrada inmediata en vigor de la ley e intenta pactar con ERC el concederles la presidencia del Parlament a cambio de que lo hagan President. Como si el socialista Salvador Illa no hubiera ganado en Cataluña y el independentismo sumara los suficientes votos para mandarlo a la oposición.

El hartazgo de la sociedad catalana con ese "procés", que nunca llegó a nada, solo se vence, a juicio de Puigdemont y Junqueras (que siguen sin tragarse el uno al otro), con otro referéndum. Este, además, arrancado al Estado al igual que la amnistía. Europa, que incluso no aprueba que el catalán sea lengua oficial en las instituciones, al independentismo le trae sin cuidado. Ellos a lo suyo.

El campo español, decepcionado con las exigentes normas agrícolas europeas y de regreso de las tractoradas que llenaron las grandes ciudades, puede no acudir a las urnas o ser abducido por Vox. Puede, por tanto, que esta última semana veamos a Feijóo, y a Zapatero (punta de lanza de Ferraz), con algún ternero o corderillo en brazos. Y así, con estos mimbres, acudiremos a las urnas el próximo domingo, en la última cita de este interminable ciclo electoral. Bueno... eso sí Sánchez no decide convocarnos de nuevo a votar ante la imposibilidad de aprobar ningún proyecto de ley.