Como cada primer fin de semana de mayo, miles de andarines de toda la ciudad se reunirán el próximo 4 de mayo desde primera hora de la mañana para celebrar la 47 edición de la Marcha Asprona.
Porque allá por 1978, cuando se produjo la primera convocatoria y en palabras de su presidenta, Ángeles García, «la marcha comenzó como llamada de auxilio para la búsqueda de recursos por parte de la Fundación Personas para que personas con discapacidad intelectual pudiesen recibir una ayuda necesaria, tener una mejor calidad de vida y lograr su integración».
Enrique Antonio, Chelo Casares y Juanjo Hermoso apoyan la marcha - Foto: Jonathan Tajes
Con el paso del tiempo, se ha ido convirtiendo en una fecha señalada para muchos vallisoletanos. «Es un reto especial para todos, porque Valladolid es de Asprona y Asprona es de Valladolid. La marcha es una seña de identidad de la ciudad», añade.
La Marcha Asprona pretende conseguir que la ciudad se vuelque con la causa, ya sea por tradición, solidaridad, por hacer ejercicio o simplemente por pasar una buena mañana con sus allegados.
Este año, además, la marcha ha decidido hacer un guiño a la Guerra de las Galaxias con el lema 'Que la marcha te acompañe'. «Cuando llega abril, recibimos montones de llamadas para ver cuando empiezan los preparativos. Lo importante es que la gente está entregada con la causa y gracias a ellos podemos atender a personas que realmente lo necesitan», señala García.
Este sábado 4 de mayo a las 09.30 horas, los andarines iniciarán el recorrido en la Plaza del Milenio, donde, además de los andarines, las piragüistas de la asociación 'Vallkirias Pisuerga', harán a bordo de dos de sus barcos una salida de honor por el río. Según Nachi García, una de sus integrantes, «comenzamos por agua, pero luego, tras guardar los barcos, nos unimos a los andarines para completar la marcha».
Tras esto, los andarines se trasladarán por las riberas del Pisuerga y el Esgueva hasta llegar a la localidad de Renedo de Esgueva para poner rumbo de nuevo hacia Valladolid, no sin antes hacer un merecido descanso para reponer fuerzas en el avituallamiento situado en el Valle de los Seis Sentidos. Finalmente, la llegada está fijada en el Campus de la Facultad de Económicas alrededor de las 13 horas.
Andarines
Chelo Casares se estrenó el año pasado como andarina y para ella fue una experiencia «muy bonita para disfrutar con amigos y familiares», sintiéndose muy arropada en todo momento. «La causa de acondicionar centros de día me parece fantástica. Sobre todo el hecho de conseguir patrocinadores para ayudar en lo que se pueda», comenta.
Y es que el fin principal de la Marcha Asprona es que las personas con discapacidad intelectual tengan unos recursos óptimos. Y este año lo que se pretende acondicionar los centros de día adjuntos a la asociación Fundación Personas Valladolid. Porque, según la presidenta «poner en la calle a estas personas, que se adapten y se integren, normalizarles es un motivo de alegría y caminando año a año podemos lograrlo».
Y para ello cada andarín debe buscar patrocinadores para la causa y añadirlos a una tarjeta que la asociación les proporciona al inscribirse. Con esta tarjeta deben conseguir donantes particulares que les patrocinen, aportando lo que deseen a la causa.
Pero si hablamos de patrocinadores, Juanjo Hermoso va bien provisto. Incluso se atreve a denominarlos como «los gigantes de la marcha». Andarín desde hace ya 22 años, es un experto y mientras le respete el cuerpo, seguirá. «Los vallisoletanos sentimos la marcha como algo muy nuestro. Estoy orgulloso de mi gente, tanto los jóvenes, que cada vez son más, como de los más veteranos. El calor y el ánimo que recibimos en todo momento no está pagado», explica.
Y es que la marcha ha visto como, en los últimos años, la presencia joven ha ido creciendo considerablemente. «Que un tercio de los andarines sea menor de 25 años muestra la importancia de la marcha para todos los vallisoletanos», explica García. «Superar el 30% de jóvenes es una noticia fantástica», añade Hermoso.
O como cuenta Enrique Antonio, un asiduo a la marcha, a la que acude con amigos y familiares «desde chavales» y colaborador corporativo de esta. «Es bueno impulsar a las juventudes y en estos temas lo es aún más».