El Pucela lleva más de un decenio sin ganar en el Pizjuán

D.V.
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Los blanquivioleta no suman un triunfo ante el Sevilla en su feudo desde diciembre de 2012, aunque en sus tres últimas visitas ha regresado con empates

Kike Pérez, en el Sevilla-Real Valladolid de la temporada 2022-23. - Foto: Efe

El Real Valladolid, que el martes visita al Sevilla en la apertura de la séptima jornada de Liga, no ha ganado ninguno de los once últimos encuentros que ha jugado frente al conjunto hispalense, ante el que suma seis empates y encaja cinco derrotas desde su última victoria, en diciembre de 2012.

Aquel día, el equipo blanquivioleta se adelantó en el Sánchez-Pizjuán con dos goles tempraneros de Ebert y Óscar González que los locales sólo pudieron descontar con un tanto de Manucho en propia puerta (1-2).

El Real Valladolid, sin embargo, ha sumado en sus tres últimas visitas a al feudo sevillista, en las que se ha repetido el mismo resultado, 1-1: con goles de Ocampos de penalti y Kiko Olivas en la temporada 19/20; repitió Ocampos desde los once metros y marcó Raúl Carnero un año después; y con tantos de Anuar y Rekik en la campaña 22/23.

Los pucelanos sólo han sumado seis victorias (11%) y diez empates (19%), frente a treinta y siete derrotas cosechadas (70%), en su más de medio centenar de partidos en el campo del Sevilla, informa Efe, donde en este siglo sólo vencieron en el referido duelo de 2012 y su anterior triunfo fue por la mínima (marcó Márquez) en la campaña 1999/2000.

En su tercera visita, en 1950, el Valladolid ganó (2-3) en el viejo estadio de Nervión -Pineda y Erasmo marcaron para el Sevilla e hicieron los goles visitantes Rafa, Coque y Vaquero- y hubo de esperar 35 años para batir de nuevo a los sevillista en su casa: 0-2 con goles de Duque y Jorge Alonso en el cierre de la Liga 1984/85.

La década de los ochenta contempló los otros dos triunfos blanquivioletas en el campo del Sevilla: 1-2 en la temporada 86/87, con doblete de Peña y tanto local de José Luis; y 2-4 en la 88/89, cuando De la Fuente y Cholo adelantaron por dos veces a los locales pero los castellanos empataron en ambas mediante Fonseca y Salguero, en propia meta, antes de decantar el choque con dos goles de Alberto.