El detenido en Burgos por la muerte del vallisoletano Sergio Delgado no reconoció los hechos cuando los agentes le interrogaron en la madrugada del domingo, después de que fuera detenido en su domicilio, tal y como informa Diario de Burgos. La Policía continúa con las investigaciones, de modo que el arrestado todavía no ha pasado a disposición judicial.
Entre las incógnitas que todavía faltan por despejar es si algunas de las personas que estaban con él trataron de encubrirle cuando los agentes comenzaron la investigación.
La familia, que sigue rota por el dolor, se personará como acusación particular en el proceso. El portavoz de la misma, Ángel Tamayo, recuerda que Sergio estaba alejado de cualquier atisbo de radicalismo en torno al fútbol. Es cierto que acudía a Zorrilla a ver algunos partidos, pero su verdadera pasión era el baloncesto, tanto como espectador como jugador aficionado. De hecho, medía más de 1,90 metros.
Agentes de la Policía Nacional detuvieron a primeras horas del domingo a un varón de 23 años, vecino de Burgos, como presunto autor material de la muerte de un joven de Valladolid que estaba en la madrugada del sábado celebrando una despedida de soltero en la Plaza de la Flora de Burgos.
Pese a que en un primer momento los testimonios recabados en la actuación policial no indicaban que el joven fallecido hubiera sufrido una posible agresión, el análisis forense y las gestiones practicadas por la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Policía Nacional establecieron la posibilidad de que, en la secuencia de hechos que llevó a la muerte del joven, podrían haber intervenido terceras personas.
De esta forma, y tras conseguir identificar a varios de los jóvenes que estaban en la zona en el momento de la muerte, se pudo determinar a última hora de la noche de ayer que la víctima había sufrido "un ataque inesperado con un fortísimo puñetazo que provocó su fallecimiento de forma prácticamente instantánea".
Una vez establecido el carácter doloso de la muerte, a primeras horas del domingo la Policía Nacional identificó y detuvo a un joven de 23 años, vecino de Burgos como autor de la agresión. En este momento se está investigando la motivación de la agresión, aunque "parece que la condición de vecino de Valladolid de la víctima pudo ser el desencadenante".
Fuentes de la Subdelagación del Gobierno en Burgos explicaron, como recoge Ical, que la investigación ha sido "especialmente compleja ante la falta inicial de testimonios que hacían presumir una muerte no violenta y la dificultad de identificar a los jóvenes implicados y de que estos recordasen con claridad los hechos, dada la hora en la que ocurrieron y el nivel de intoxicación etílica de muchos de ellos".
El arrestado será puesto a disposición judicial una vez que se concluya la confección del atestado policial.
El delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, expresó su rechazo a esta "tragedia" y trasladó a la familia las condolencias, aunque rehusó dar más detalles del caso, toda vez que la investigación sigue abierta.
Pasquines de grupos ultras
El joven detenido portaba, en el momento de la detención, pasquines de grupos ultras del Burgos Fútbol Club, según han explicado a EFE fuentes de la investigación. El grupo Resaca Castellana ha querido salir al paso de algunas informaciones que les vinculaban con estos hechos para desvincularse de los mismos y lamentar lo ocurrido. El delegado del Gobierno tampoco confirmó si la Policía ha confirmado estas vinculaciones.