El técnico del Real Valladolid, Paulo Pezzolano, comentó tras el empate ante el Athletic que duele que se vaya el partido así en la última jugada, "porque además hubiera sido muy importante la victoria en el plano anímico y moral del equipo".
"Duele mucho porque el plan salió excelente, como para habernos llevado los tres puntos: el rival no podía generar, porque les tapamos los espacios que utilizan tanto, e hicimos transiciones para tratar de sorprenderles, generamos ocasiones y marcamos", afirmó. Por eso consideró que lo que le faltó a su equipo fue "sacar la última pelota", ya que sabían que era un rival vertical, con muchos jugadores que rompen fácilmente, y los mantuvieron a raya, hasta que llegó esa última falta, y entró.
Aunque desplegó una defensa de cinco líneas, aclaró que esta se repetiría si el rival así la requiere, pero su planteamiento va cambiando siempre según el equipo que tengan enfrente y, en este caso, esa figura consideraron que era la adecuada, y funcionó.
A pesar de esa buena defensa, el cuadro blanquivioleta volvió a encajar gol, pero fueron "más sólidos, ya que ellos no tuvieron ocasiones de gol claras, y este llegó con una pelota quieta, que convirtieron". "Ha sido desafortunado. Se van corrigiendo cosas, porque hoy tuvimos opciones de gol claras, y hay que seguir por el camino del crecimiento, y buscar no encajar", añadió, centrando ya su pensamiento en el próximo partido tras el parón de selecciones.
Precisamente, por ello, insistió en que "hubiera sido muy positivo quedar fuera del descenso, pero esto va a ser así, si se gana uno, se va a salir, y está claro que los partidos ante rivales directos hay que ganarlos e ir a por todo para sumar de a tres.
Respecto a su séptima tarjeta amarilla, aseguró que no le preocupa, pero sí que la roja que señalaron a Prados la dejasen en amarilla, porque, en su opinión "fue roja, porque Raúl Moro salió con el tobillo muy hinchado", ha concluido.
Valverde: "Es un resultado justo"
El entrenador del Athletic Club, Ernesto Valverde, por su parte, consideró que el resultado es justo. Afirmó que los suyos dominaron la posesión, pero no tuvieron opciones de gol, faltaba profundidad y el conjunto local defendió bien. "Ha sido un encuentro espeso por nuestra parte, que pudo ser 0-0 y ha sido 1-1. Es cierto que ha sido una semana complicada con dos viajes muy seguidos, pero hemos cambiado jugadores, y lo que ha pasado es que ellos nos han defendido bien", expuso.
Destacó que el Athletic quiere competir en Europa, pero también estar en liga y, tras haberse cumplido un tercio de la temporada, van bien en ambas competiciones "porque además entre ellas se retroalimentan". Además, al ser preguntado por las dificultades que encuentran cuando se enfrentan a rivales que se cierran atrás, indicó que "hay que amoldarse a esas situaciones, porque siempre se puede romper y hay capacidad para hacerlo".
Respecto a los tres cambios realizados al descanso, reconoció que el conjunto vasco estaba plano en el juego, y había dos jugadores en el centro del campo con tarjeta amarilla, a lo que añadió un delantero para ir más a por el partido.
En cuanto a Yeray, dijo que es fundamental para el Athletic: "Ha tenido problemas musculares que le han impedido tener continuidad, pero es importante que sume minutos y nos ayude, porque su capacidad competitiva es alta, aunque hay dos internacionales como Paredes o Vivian y tiene que ganárselo también".
Con 20 puntos en 39 jornadas, tiene claro que eso implica "lograr una media de 60" y admitió que, aunque a todo el mundo le gusta tener más, están sabiendo compaginar dos competiciones y siguen en condiciones en ambas. Por último, preguntado por la participación de Iñaki Williams con la selección de Ghana, indicó que no cree que pueda jugar, porque si no lo pudo hacer en este partido, difícilmente podrá en otro.