Renault activaba el pasado miércoles su plan de modificación sustancial de las condiciones de trabajo de 147 empleados de las factorías de Valladolid (84 de Carrocerías y 63 de Montaje) y 73 de Palencia para bajar producción en el primer semestre de 2024, con cambios de turno incluidos aunque sin movilidad geográfica, una vez resuelto el periodo de consultas que se desarrolló del 31 de octubre al 14 de noviembre. La empresa no necesitaba ningún acuerdo porque la negociación no era vinculante, pero obtuvo el visto bueno de la mayoría sindical (por UGT y SCP, frente al rechazo de CCOO y CGT), que valoró sobre todo que se rebajara la cifra inicial de afectados de la plantilla estable (se pasó de plantear la reubicación de 488 indefinidos en la primera reunión a 220 en la segunda y tercera), así como el compromiso de respetar la duración de los contratos de los eventuales. Sin embargo, quedó en un segundo plano la intención de no renovarles, y en total son unos 450 empleados los que apuntan a dejar la empresa de forma progresiva. Más de los que trabajan en una fábrica del tamaño de Lingotes Especiales (341), por ejemplo.
Cierto es que cabe la posibilidad de que, en el segundo semestre de 2024, Renault necesite refuerzos y acometa nuevas contrataciones si el mercado le demanda recuperar ritmo de producción, y más teniendo en cuenta que prevé lanzar los nuevos modelos antes de mayo. En Valladolid prepara ya el nuevo Captur (fase II), junto a su gemelo Mitsubishi ASX; y también está el DJB, denominación industrial que apunta a revelarse como una variante del Captur más larga y coupé, al que la prensa especializada ya alude como Grand Captur, a la espera de que Renault lo bautice oficialmente. Y en Palencia empezarán a fabricar en serie el Rafale.
La acogida de los nuevos modelos se presume así clave para el devenir laboral de unas y otras factorías que, justo antes de que empezara el periodo de consultas el 31 de octubre, superaban los 5.600 empleados: 2.300 en Palencia y 3.329 en Valladolid (1.123 en Carrocerías y 2.206 en Montaje), con una tasa de temporalidad en torno al 8% que se traduce en unos 450 eventuales.
Causas
La bajada de producción comenzará en enero y se prolongará al menos durante el primer semestre de 2024, según la información facilitada por Renault a los sindicatos. Entre las causas que alegó para justificar este nuevo escenario, aparte de los cambios de modelos, advertía de los problemas de suministro de componentes por parte de proveedores que empezaron tras la pandemia y todavía persisten, aunque en menor medida; y ajustes para adaptarse a una nueva normativa de ciberseguridad. UGT y SCP dieron por buenas las explicaciones, presumiendo que se trata de una situación coyuntural y con la esperanza de que, pasado el primer semestre, se recupere empleo y se ofrezca a los reubicados la opción de volver a sus puestos previos a la modificación.
CCOO, en cambio, consideró que ni el contenido de la memoria escrita ni los argumentos trasladados de palabra por Renault durante las reuniones justifican tales medidas, y criticó que se dejara fuera de la negociación a otros trabajadores afectados por cambios de funciones que ya se estaban materializando, aunque no implicaran pasar a otro turno, a diferencia de los 220 incluidos en el listado de la modificación sustancial de condiciones.
En CGT, mientras, siguen pensando que «esto es un problema estructural» que sufre la plantilla desde la pandemia, «y Renault no ha puesto ninguna solución más que implementar medidas de flexibilidad». «Esta modificación sólo va a servir para que la empresa aproveche para realizar los cambios que quiera sin tener la certeza de volver a la situación actual en el segundo semestre de 2024, tal y como nos informa la dirección», señaló en un comunicado; y sin garantías de que no se apliquen «otras medidas», en velada alusión a hipotéticos expedientes de regulación de empleo.
Asimismo, tanto CCOO como CGT han manifestado su sorpresa en estas semanas por que se atribuyan tales medidas a los nuevos modelos, cuando lo habitual en esas circunstancias solía ser aumentar plantilla. Pero todos cruzan los dedos, en cualquier caso, por que estos acaben aportando más empleo, aunque de inicio se pierda.