La historia está para contarse. Y la del Baloncesto en Silla de Ruedas (BSR) Valladolid es de esas que no debe olvidarse. El club es uno de los veteranos de la Superliga, nueva denominación de la División de Honor del baloncesto en silla de ruedas. Milita en la elite desde 1998 y, en estos años, ha sumado un título liguero, en la temporada 2010-2011; y uno como campeón de la Copa de Europa Willi Brinkmann en 2010. 

Para la temporada 2024-2025, que arrancó ya hace una semana con victoria, mantiene su estructura en el cuerpo técnico, con José Antonio de Castro como alma máter; con la llegada de cinco nuevos jugadores –Paco García Quiles, Joaquín Robles, Bea Zudaire, Lucas Müller y Mahmut Açikgöz–, que se unen al bloque de la anterior campaña –Jonatan Soria, Jelmer Van Brunschot, Maor Lasri, Matías Méndez, Adrián Pérez y Franco Alessandrini–. El equipo, con la retira de José Luis Robles, tiene como nuevo capitán a Jonatan Soria.

Aliados por la Integración seguirá siendo su patrocinador principal los dos próximos años, aportando 170.000 euros, a razón de 85.000 por cada campaña.

El equipo pucelano ya ha dejado claro que este curso aspira a meterse en la fase final de la Copa del Rey y en la Final Four de liga, además de en la fase final de la Euroliga 2, competición continental cuya fase de grupos será en marzo de 2025.

A diferencia del pasado año, De Castro cuenta desde la pretemporada con todos sus jugadores, lo que le ha permitido conjuntar todas las piezas. «El Fundación Aliados tiene la obligación de estar entre los cuatro mejores de la Superliga, por su historia y estatus, y desde luego el equipo lo va a dar todo en la cancha para poder conseguirlo», palabra del capitán.