La Asociación Vecinal 'Ribera de Curtidores' ha instado al alcalde de la ciudad, Jesús Julio Carnero, a la "reflexión" y asegura que eliminar el carril bici de Isabel La Católica no mejorará la fluidez del tráfico.
En un comunicado remitido a Europa Press, la asociación pone el foco del problema en la zona semaforizada que regula el tráfico peatonal y el de vehículos, autorizando o prohibiendo la salida de los coches de Doctrinos, de los que lo hacen desde el puente o de los que circulan en ambos sentidos por Isabel la Católica, sin olvidar el tránsito peatonal cruzando todos los viales citados.
"Para regularlo, la fase completa cuenta con 140 segundos; siendo los técnicos municipales quienes han optado por repartir los tiempos del mejor modo posible para dar servicio tanto a los peatones como a los vehículos. Y en lo que nos afecta, lo hicieron del siguiente modo: Siendo 140 segundos el total de la fase, 35 se concedieron con semáforo en verde al tráfico rodado que circula por Isabel la Católica en sentido Sur", detalla la asociación en un comunicado.
En este punto insiste en que el diseño actual cuenta, antes de llegar al punto semafórico, con dos viales de una longitud aproximada de 80 metros capaces de albergar un máximo de doce vehículos por vial, añaden.
"Tras hacer la comprobación 'in situ' se ha podido constatar que en el tiempo que está en verde el semáforo, 35 segundos, el número de vehículos que logran pasar son, un máximo de 26 y un mínimo de 22. Máximo, cuando los vehículos son ligeros y circulan hacia San Ildefonso si virar, pero, mínimo, cuando algún coche del carril derecho se enfila hacia el Puente, reteniendo a todos los que estén en ese vial", explica.
De ahí que concluyan que mientras exista "ese cuello de botella y no se le dé al semáforo más tiempo en verde, cosa harto difícil", nada se conseguiré con eliminar el actual carril bici "por mucho que se cree un segundo vial en todo el recorrido". "La cosa es de cajón", subraya.
La propuesta de la Asociación es instar al alcalde a "no despilfarrar ni un euro en actuaciones poco pensadas", y más, si antes de acometerlas "no ha podido demostrar que el resultado será el pretendido".
"Es más, si se hacen desaparecer este y otros carriles bici, los ciclistas seguiremos utilizando para nuestros desplazamientos los viales usados por el resto de los vehículos, lo cual repercutirá negativamente en la seguridad de los bicicleteros, pero también, en la ralentización de los vehículos a motor. El uso de la bici es imparable y cada vez va a más. El Ayuntamiento está en la obligación de dar seguridad a este medio de transporte aunque sea en detrimento del vehículo privado. La salud aconseja eso", concluye.