“Ha sido un año muy complicado. Todos hemos fallado y está claro que la cuota más importante es la del míster”. Sergio González asumió la culpa de una temporada para olvidar que devuelve al Real Valladolid a Segunda tres años después.
“El partido de hoy es un fiel reflejo de toda la temporada. Hemos tenido buenos minutos, pero en otros nos hemos llevado un golpe muy fuerte”, lamentó el técnico, que hizo balance del curso: “Hemos tenido muchas oportunidades de poder conseguir la salvación y por circunstancias no hemos cogido la ola buena para tener ese empujón. No empezamos bien, sobre todo a nivel de resultados. Fuimos capaces de rebelarnos y a la mitad de la Liga 19 puntos. Después, una racha importante que nos privó de sumar. Estuvimos fuera del descenso y con la sensación de estar cerca de ganar y al final no lo hemos hecho. Todos estamos frustrados porque no hemos sido capaces de sacar nuestro trabajo”.
El entrenador blanquivioleta afirmó que su equipo puso “todo”, pero apuntó que “hay veces que no salen las cosas”. “Es momento de estar unidos. No hemos estado a la altura y es momento de pedir perdón a la afición. Estoy convencido de que el Real Valladolid va a volver a Primera. Se va a pelear para que así sea”, señaló en declaraciones recogidas por los medios del club.
También destacó el apoyo de Ronaldo Nazário durante los momentos complicados de la temporada y dejó el futuro para las siguientes fechas. “En los próximos días se trabajará sobre el año que viene”, concluyó.