El mapa de transporte eliminará paradas de bus en 24 pueblos

R.G.R.
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El Ministerio de Transportes adopta una decisión que afectará a unos municipios en los que viven 32.643 habitantes, con 8.794 usuarios. Esta reestructuración de la concesiones afectarán a 346 localidades en la región

El mapa de transporte eliminará paradas de bus en 24 pueblos - Foto: J.TAJES

Preocupación entre los alcaldes de los municipios afectados por el nuevo plan de reestructuración del Gobierno que prevé dejar sin paradas de autobús a 24 municipios de la provincia. El documento que maneja el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) refleja que actualmente en estas localidades existen 37 marquesinas donde se bajan y se recogen viajeros de autobuses de rutas y que si se hace efectivo este plan dentro del proyecto de Ley de Movilidad Sostenible se rebajarían a 11, algo que los regidores consideran un palo más en la rueda en la prestación de servicios.

24 municipios se quedarían sin este tipo de paradas y el servicio, si finalmente se elimina, tendría que ser sustituido a través de la prestación gestionada por la Junta de Castilla y León. Se trata de los municipios de Alaejos, Ataquines, Becilla de Valderaduey, Berrueces, Cabezón de Pisuerga, Campaspero, Canillas de Esgueva, Ceinos de Campos, Fompedraza, Mayorga, Mota del Marqués, La Mudarra, Peñafiel, Pesquera de Duero, Piñel de Abajo, Piñel de Arriba, Rueda, Simancas, Torre de Peñafiel, Vega de Valdetronco, Villalón de Campos, Villanubla, Villardefrades y Zaratán. 

En muchos de estos casos, se trata de pueblos ubicados en autovías o en carreteras nacionales, donde pasan los trayectos de autobús entre comunidades autónomas. Los pueblos afectados son de muy diversa índole. Aquellos que cuentan con menos población disponen de menos trayectos para que sus vecinos se puedan trasladar. 

Según los datos que maneja la Junta de Castilla y León, a través de información facilitada por el Ministerio de Transportes, dejan de tener parada dentro del territorio de Castilla y León 346 municipios, con una población de 213.436 habitantes, que en el año 2019 tuvieron una demanda de 92.078 viajeros. En la provincia de Valladolid, el número de pueblos que se quedan sin paradas por esta reestructuración son 24, con una población cercana a los 35.000 habitantes y el número de viajeros que utilizaron estas líneas fue de 8.794 ese año. 

Ante esta situación, el Ministerio y la Junta de Castilla y León se han enzarzado en una batalla dialéctica sobre qué administración es la verdadera culpable de que estos municipios se vayan a quedar sin parada. El Ejecutivo regional entiende que el Gobierno golpea los intereses de los vecinos del medio rural eliminando un nuevo servicio, mientras que desde el Ministerio aclaran que se trata de viajes dentro de la misma comunidad autónoma y que esta competencia es cuestión de la Junta, no suya. «Si se les dan los recursos y la competencia es suya, en vez de gastar tiempo en criticar al Gobierno,  quizá lo que deban es poner a trabajar y hacer su trabajo».  

Por el contrario, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, ha declarado que llegarán «incluso a los tribunales», tras asegurar que el documento que maneja Transportes contempla la eliminación de 346 paradas de los autobuses interurbanos que unen los diferentes municipios de la Comunidad, algo que calificó como «un nuevo palo» a Castilla y León.

El alcalde de Mayorga, David de la Viuda, manifestó su preocupación por esta situación. En su caso, este tipo de autobús pasa tres días a la semana por la localidad (lunes, miércoles y viernes), mientras que el servicio de la Diputación lo hace los martes y los jueves. «Si nos quitan el servicio al final lo que hacen es matar a los pueblos. Estamos a más de una hora del hospital y la gente tiene que salir a las ocho de la mañana con una cita a las tres. Si encima no tenemos ni eso, pues ya no sé...». «Es un servicio básico para los pueblos y sin transporte es mucho más complicado residir en el medio rural», lamentó el regidor y diputado provincial. 

En Castilla y León, la población que se vería afectaría sobrepasa los  213.000 personas (casi el diez por ciento de los habitantes de la Comunidad). 

Sin fecha de momento.

De momento, ni los ayuntamientos afectados ni la Diputación de Valladolid tienen conocimiento de cuándo se llevará a cabo esta supresión de las frecuencias de autobús y, por lo tanto, no están adoptando ninguna medida a la espera de que el Ministerio de Transportes tome la decisión.