La hostelería se reactiva. Así se podía leer este fin de semana en la edición impresa y online de El Día de Valladolid. Y, como muestra, se ponían un sinfín de ejemplos, cerca de la veintena, con aperturas, reformas, nuevas propiedades...

El inicio de esta semana no ha hecho más que confirmar lo vivo que está el sector en la capital, con el anuncio de un nuevo local pero con una cocina muy conocida; y un cambio de propietarios en uno de los clásicos de las últimas cuatro décadas.

Empezando por el nuevo, uno de los tres hermanos Vielba, Santi, Sara y Macarena, abrirá un restaurante en la calle Zúñiga, donde durante nueve años Chisco Alonso desarrolló su trabajo en La Garrocha. Santi se trasladará al número 21 de esta céntrica calle para mantener la esencia del Restaurante Santi, Caballo de Troya, pero en un formato más pequeño. "De momento solo usaré la planta de arriba del local, que esperemos se pueda abrir en un mes y medio o dos meses", señala el propio Santi, que aún no tiene nombre. 

Así que Sara y Macarena seguirán al frente de uno de los restaurantes más emblemáticos de Valladolid, ubicado en la calle Correos en en un palacio construido en el siglo XVI y que lleva abierto más de tres décadas; mientras que Santi dará continuidad a esa cocina de toda la vida en un local más pequeño.

Por otro lado, Alfonso García empezará esa semana a despedirse de su 'Don Bacalao'. El restaurante seguirá manteniendo el nombre y parte de su cocina pero cambiará de manos en octubre.