La provincia regresa estos días al pasado, en forma de recreaciones históricas, fiestas en torno a la tradición y celebraciones que invitan a la vuelta a los orígenes. Una muestra de ello se podrá ver en cuatro localidades vallisoletanas, Cabezón, Campaspero, Castrillo de Duero y Nava del Rey.
En esta última, este sábado, tendrá lugar la XIII Fiesta de la Siega, cuyo objetivo es mantener las tradiciones rurales. Se trata, como relataban en su presentación, de un homenaje a todas esas personas que, «desde que el sol salía hasta que el sol se ponía, pasaban los días con la espalda doblada» y que «siempre tiene el mismo objetivo, que es la siega». La Fiesta comenzará a las 7.30 horas con un replique de campana; luego habrá concentración de segadores y espigadoras, la Trilla, la limpieza y la recogida de la miel, además de mucha música y gastronomía.
Campaspero se vestirá de época este fin de semana, con la V edición de la recreación histórica 'En El campo Te espero' y su Mercado Medieval, eventos con los que volverá a sus orígenes para explorar su legado cultural, trasladando a los visitantes al siglo XI. La localidad confiere un aspecto legendario, en la medida en que alrededor de 200 personas, con indumentaria de la época, reviven en este páramo de caliza blanca, las convivencias y desavenencias de dos culturas diferentes.
Cabezón también regresará al pasado este sábado con Vacceos, fiesta de Lugnasac, una representación histórica que cuenta con un mercado artesano; con recreaciones de raptos de doncellas; catas de miel y vino; juegos y talleres; desfile de antorchas y recreación nocturna de enfrentamientos entre tribus y tropas romanas. Todo en el marco del año 140 y 50 a C.
Mientras que Castrillo de Duero celebrará la IX 'Boda del Empecinado', la recreación de la boda entre Juan Martín Diez y Catalina, que tendrá lugar este sábado a las 19.30 horas y que como novedad realizará el «casamiento en la iglesia» al inicio para evitar las altas temperaturas. La presidenta de la asociación 'Cultyocio', María Ángeles Acebes, destaca «la importancia de la celebración de esta representación en una localidad que ni siquiera se ve desde la carretera nacional». El evento cuenta con la colaboración de vecinos de localidades próximas como Peñafiel, Olmos de Peñafiel o Cuevas de Provanco.