La consejera de Movilidad y Transformación Digital, María González, destacó hoy su "objetivo claro" de mantener el "patrimonio viario, cultural, histórico y artístico" de la Comunidad, aspectos que se conjugan en el puente medieval de Simancas, donde la Junta invierte 1,2 millones de euros en obras de rehabilitación y conservación.
González Corral visitó hoy esta actuación sobre el conocido como puente romano, acompañada del alcalde del municipio, Alberto Plaza, y la delegada territorial de la Junta, Raquel Alonso. La consejera precisó que las obras se iniciaron el 1 de julio, y está previsto que concluyan el 31 de diciembre de 2024, es decir, un plazo de 18 meses.
María González comentó que el puente ha sufrido distintas inclemencias y causas que lo han ido deteriorando, como las riadas de los años 60, o las trapas napoleónicas durante la guerra de la independencia, que tiraron varios ojos para impedir el paso de tripas inglesas. "Debemos actuar en prevención y mantenimiento", dijo, para concretar que "actuarán en las bases y pilares y en todo el revestimiento, y se emplearán distintos morteros para las fisuras y juntas, se rellenarán las erosiones, y al final acometerán el pavimento y la iluminación".
El puente de Simancas se ubica en el antiguo trazado de la calzada romana entre Augusta Emérita y Caesaraugusta y, en la actualidad, se destina solo al tránsito peatonal. Se trata de un puente medieval de piedra, construido en sillería con 17 arcos, la mayoría ojivales, con tajamares y contrapilares. Ocupa un lugar de gran importancia para las comunicaciones terrestres desde la antigüedad y hoy en día forma parte del trazado del camino de Santiago de Madrid. Este bien patrimonial cuenta con algunos deterioros debidos, principalmente, al paso del tiempo, que requieren de la intervención que se está ejecutando para evitar mayores riesgos para su estructura a medio y corto plazo.
Para dar solución a esta situación, la Consejería de Movilidad y Transformación Digital ha iniciado los trabajos de rehabilitación con una serie de actuaciones de carácter preventivo, para impedir las filtraciones de agua y las erosiones en las bases de los tajamares. En estos momentos se está trabajando en la protección y reparación de las zonas dañadas en las bases de tajamares y espolones, la colocación de sistema de andamiaje y el saneo y limpieza de la superficie del puente.
Además, el proyecto de obra contempla actuaciones paliativas, de reparación superficial de la fábrica dañada, que consisten en un conjunto de actividades para sanear los paramentos, regenerar la superficie de los sillares y protegerlos frente a los distintos agentes (rejuntado de sillería, reconstrucción de sillería mediante mortero de cal natural, inyección de mortero de cal para sellado de las grietas existentes, saneo y relleno de zonas erosionadas en la base de los tajamares…) y actuaciones en plataforma, pavimentación y drenaje (retirada de farolas y señales verticales, demolición del pavimento existente, revestimiento impermeable, pavimentación con adoquines de granito, reposición y mejora de los servicios existentes sobre la plataforma del puente tales como la conducción de telecomunicaciones y alumbrado).