Confirman la condena a un joven por dos agresiones sexuales

D. V.
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El TSJ ratifica la pena impuesta por la Audiencia Provincial al procesado, dos años de prisión y cuatro de alejamiento de las víctimas, por agredir sexualmente a dos amigas menores de edad

Sede del TSJ de Castilla y León.

El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha confirmado la condena dictada por la Audiencia Provincial de Valladolid a un joven por agredir sexualmente a dos amigas, que eran menores de edad, con un año de prisión por cada uno de los delitos. Además, se le prohíbe durante dos años por cada uno de los dos delitos el aproximarse a una distancia inferior a los 100 metros de las víctimas, así como a sus domicilios, centros de estudios, trabajos o lugar en que ellas se encuentren, al igual que la comunicación con ellas por cualquier medio o procedimiento. 

La sentencia también impuso a dicho condenado la medida de libertad vigilada, durante dos años, seis meses y un día por cada uno de los dos delitos; y la pena de inhabilitación especial durante tres años por cada uno de los dos delitos para cualquier profesión, oficio o actividad, sean o no retribuidas, que supongan un contacto regular y directo con personas menores de edad.

Los hechos se remontan, en primer lugar, a marzo de 2022, cuando el acusado se encontraba en una vivienda ubicada en Laguna de Duero con un grupo de amigos, entre las que se encontraban las víctimas, sin que tuviera conocimiento que estas fueran menores de 16 años. 

Transcurrido un tiempo, el acusado acompañó a una de las víctimas a una habitación, donde sin hablar entre ellos y con intención de satisfacer su apetito sexual, introdujo sus manos entre el pantalón que ella vestía y le tocó las nalgas, como también los pechos por debajo de la camiseta, sin que la menor llegase a reaccionar al no comprender esa actitud. Tras ello, el varón abandonó la habitación y, poco después, el inmueble.

En segundo lugar, en la noche del 16 de abril de 2022, se reunió el grupo en el domicilio de uno de sus miembros, ubicada también en la localidad vallisoletana, donde todos ellos cenaron, vieron películas y jugaron a diversos juegos. 

La primera víctima se marchó a una de las habitaciones a descansar, en compañía de otras dos amigas más. Ya de madrugada, el acusado se tumbó en la parte de abajo de la litera, que ocupaba la segunda víctima, quien se encontraba durmiendo. El varón se arropó con la sábana que utilizaba esta, aprovechando esa situación el acusado para, con intención de satisfacer su apetito sexual, retirar el sujetador que ella vestía y tocarle un pecho, quedando bloqueada la menor ante el comportamiento de su amigo, momento en el que abrieron la puerta de la habitación y encendieron la luz otras dos amigas, yéndose en ese momento del lugar el acusado.