“Salimos a rodar. El Maverick es una máquina potente, muy nerviosa que va francamente bien. Seguimos trabajando, poniendo a punto todo para Perú". Así resumía el vallisoletano Roberto Carranza su actuación en Zuera, sede de la última prueba del Nacional TT, donde acudió con la idea de acumular kilómetros y rodar todo lo posible en el Can-Am Maverick con el que competirá en el Dakar 2019.
Con el título de T1-N ya asegurado, tomaron parte en la categoría Open, aunque lo importante era acomodarse al nuevo vehículo. Asistidos por el FN Speed recorrieron 400 kilómetros cronometrados durante la jornada del viernes y el sábado. Carranza cogió rápidamente el tono a su Can-Am, terminando la prólogo de tan solo 9 kilómetros en 36º lugar. El sábado comenzó con una especial de 186 kilómetros. Momento para test sobre competición real. El Promyges Rally Team marcó un ritmo muy regular y terminó el tramo sin perderse, sin mayores incidencias, en 22º lugar de la general scratch.
"Estamos encantados con el vehículo, las suspensiones aportan muchísimo a la conducción. Hemos ido con mucha precaución para no golpear mucho el coche ya que la próxima semana embarca hacia Perú”, añade Carranza.
El segundo sector del día consistía en una repetición del anterior. El vallisoletano seguía haciendo kilómetros para probar su Can-Am aunque a buen ritmo y conseguía terminar el rallye 18º de la general y primero en la categoría Open.
Con esta carrera en el Promyges Rally Team cierra la temporada 2018 con broche de oro siendo campeón nacional de T1-N. El Can-Am Maverick se encuentra ya rumbo a Perú y en próximas fechas el equipo viajará a Marruecos para seguir el plan de preparación para el Dakar 2019.