El Real Valladolid afrontará este verano una nueva obra en sus instalaciones. A falta de la 'gran' reforma prometida por el actual equipo de Gobierno del Ayuntamiento, el club anunció esta semana, casi por sorpresa, que renovará la fachada del Estadio José Zorrilla. Lo hizo exhibiendo una imagen futurista en la que se ve un lavado de cara que dará un aspecto totalmente diferente al coliseo, con el color característico de la entidad y dejando atrás el actual gris.
El club invertirá en esta obra casi un millón, concretamente 990.000 euros, que saldrán del fondo CVC –a la entidad le corresponden 42 millones del acuerdo firmado en 2021 con LaLiga, de los que gran parte destinará a la ampliación de su Ciudad Deportiva–. Este mismo lunes, 17 de junio, está previsto que arranque la reforma en esa facha y el objetivo es acabarla a finales de septiembre.
Será, como se señala en las oficinas del Real Valladolid, una 'piel' formada por pintura, vinilos, policarbonatos, lonas... y los números y letras adosados a dicha piel.
Será la principal inversión este verano en infraestructuras, a la espera de la Ciudad Deportiva, de la reforma del estadio, de la adecuación de los aledaños y de otros proyectos gestados en los últimos años.
El club aprovechó esta obra para hacer pública la cifra invertida en reformas desde que Ronaldo Nazário es presidente: «Son más de 11 millones de euros los que el club ha destinado en los últimos seis años a mejorar la comodidad de los aficionados tanto en Zorrilla como en los Anexos, y a modernizar las instalaciones que disfrutan abonados, seguidores, jugadores profesionales y de cantera, y todos los que visitan el Estadio a lo largo de la temporada».
Vamos a ello.
La primera gran obra se acometió al año siguiente de la llegada del astro brasileño. Ronaldo fue presentado en septiembre de 2018 y en el verano de 2019 se eliminó el foso que rodeaba el césped del José Zorrilla. El club invirtió unos 2 millones de euros para esa actuación, la ampliación del aforo hasta las 27.618 butacas, la incorporación de los banquillos en la grada, la creación de unas localidades VIP detrás de dichos banquillos, un nuevo acceso desde el túnel de vestuarios, videomarcador y nuevas barras de bar...
Unos meses antes, en febrero de 2019, había estrenado oficina en Madrid, situada en la calle Serrano, 6, con unos 250 metros cuadrados divididos en varias estancias, con una sala presidencia, una de reuniones, una de marketing y una de negociado, además de otras dos pequeñas salas de espera y una zona donde no faltaba el verde.
Un año después, en el verano de 2020, el Real Valladolid destinó una nueva gran inversión, de nuevo cerca de los 2 millones de euros, para sustituir la iluminación del estadio (adecuándose a las exigencias de LaLiga), adaptar las oficinas y cambiar la imagen de la sala mixta y la entrada a vestuarios; a lo que se unió la ampliación y sustitución del césped de uno de los terrenos de juego de los Anexos –el que usaba la cantera y las escuelas de la Fundación; y ahora utiliza habitualmente el primer equipo siendo ya de hierba natural– y la construcción de un cuarto campo, en una zona de tierra aledaña.
Con un color morado mucho más intenso y varias leyendas como 'A muerte con tu escudo y tus colores', 'Pucelanos, ¡reuníos!', 'Este grito cantarás', la zona mixta, la de paso tras entrar en el estadio antes de los vestuarios, se modernizó, abriendo el espacio de la antigua sala de prensa al túnel de vestuarios, con una gran cristalera; y trasladando ésta a otra de las estancias. Se amplió el gimnasio, se construyó una cocina, una nueva sala VIP...
La iluminación (1,2 millones) permite, desde entonces, el juego de luces en los inicios de los partidos, que en algunos casos viene acompañada por la música de 'Juego de Tronos'.
Los Anexos también han sido remozados. Con un nuevo acceso –incluida una subida para personas con movilidad reducida–, mejora en los vestuarios, nuevos soportes de publicidad y, sobre todo, una visera en la tribuna de los campos principales. Se colocó aprovechando la pandemia del covid, arrancando las obras en abril de 2020 y concluyendo un mes después.
En diciembre de ese 2020, el propio Ronaldo presentó todas estas obras, asegurando que ya llevaba 7 millones invertidos (añadiendo el cambio de césped, con un 100% de arena que le permitía ser más blando que un híbrido, y una inversión de más de 400.000 euros en las máquinas para la conservación del terreno de juego).
La entidad, en este tiempo, también ha comprado el edificio de la residencia de jóvenes jugadores, con un valor de 6.477.000 euros en su activo, aparte de otras mejoras, como algún talud, transformadores, acometidas eléctricas...
Todo ello, según se señala desde el Real Valladolid, ha costado once millones de euros desde esos inicios de las mejores a principios de 2019.
Aunque sigue sin poder acometer su gran proyecto, donde tenía previsto invertir unos 15 millones, la ampliación de la Ciudad Deportiva. En el parking del José Zorrilla mantiene su pretensión de levantar un miniestadio con capacidad para 2.000 espectadores, dos campos más (que se sumarían a los cuatro ya existentes) y cuatro edificaciones con dotaciones para primer equipo, categorías inferiores, empleados...
Este proyecto depende del Ayuntamiento. Más concretamente del convenio que debe firmar el consistorio con el que quiera hacer obras en la zona del parking (para ello se sacará a licitación el espacio y el proyecto).
Antes, incluso, puede llegar el proyecto de la reforma del estadio que prometió el alcalde, Jesús Julio Carnero, en las elecciones del pasado año. Su intención es comenzar con el cerramiento de la grada sur, que se espera arranque en 2025.