El balonmano vallisoletano llora el fallecimiento este jueves en Valladolid de Fernando Bolea Alonso, mítico jugador aragonés, internacional, vinculado estrechamente a Zaragoza, a Irún y a Valladolid.
"La noticia de su pérdida nos entristece a muchas personas puesto que Fernando ha seguido con el balonmano como técnico hasta hace muy pocos años, en la cantera del Atlético Valladolid. Sin embargo en los últimos años una enfermedad degenerativa se apoderó de él", se señala desde la Federación de Castilla y León de Balonmano.
Bolea llegó al ACD Michelin de Valladolid, procedente del Corazonistas de Zaragoza, donde, logrando el ascenso a División de Honor (Asobal), estuvo cinco temporadas y recibió la llamada de la selección nacional, debutando en 1989 y participando en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, el Mundial de Suecia 1993, el Europeo de Portugal 1994 y el Mundial de Islandia 1995. Después de Valladolid recaló en Irún, en Hammel y en Zaragoza, donde inició su carrera como entrenador de éxito. Afincado en Valladolid desde su salida del Bidasoa en 2016, Bolea formó parte del staff del Recoletas Juvenil la temporada 2018-19.