En el marco de las actuaciones que de forma habitual realiza la Guardia Civil sobre la protección de flora, el pasado jueves, la Guardia Civil de Valladolid recibió la comunicación de un ciudadano en la que ponía en conocimiento le venta de una planta en un vivero de la provincia de Valladolid, la cual podría estar prohibida por considerar que era una especie exótica invasora. Por parte de la Guardia Civil, se procedió a inspeccionar el vivero en cuestión, concluyendo con la intervención de diecinueve plantas de cortaderia selloana, las cuales se encuentran recogidas en la R.D. 630/2013, de 2 de agosto, como especies exóticas invasoras, según informó el Instituto armado en un comunicado.
Dicha actuación se enmarca en la estrategia del Ministerio de la Transición Ecológica sobre la gestión, control y posible erradicación del plumero de la Pampa (Cortaderia selloana) y otras especies de cortaderia, ya que la plantación de estas especies supone un impacto ecológico, en ocasiones catastrófico, considerándose actualmente que las invasiones biológicas son la segunda causa de pérdida de biodiversidad a nivel mundial, tras la alteración y destrucción de hábitats.
Una especie exótica invasora es aquella que, extraída de su medio original, es capaz de establecerse en un ecosistema o hábitat natural o seminatural, y que es un agente de cambio y amenaza para la diversidad biológica nativa, ya sea por su comportamiento invasor, o por el riesgo de contaminación genética, según la definición recogida en el referido Real Decreto.
La pretensión de este tipo de actuaciones es evitar que especies exóticas invasoras, ya sean plantas o animales, terminen en el medio natural y lleguen a producir daños en el patrimonio natural y la biodiversidad ya que
desempeñan una función social relevante por su estrecha vinculación con la salud y el bienestar de las personas.
Concretamente estas plantas ahora retiradas de la venta, según el Gobierno de España, poseen una gran capacidad invasiva y transformadora del medio, afectando, en la actualidad, a espacios protegidos y hábitats de
interés comunitario de zonas costeras y sistemas fluviales. La especie c. selloana se ha convertido en un problema ecológico en España, siendo la mitad norte de la península la que se ha visto más afectada hasta la fecha,
aunque existe ya presencia en los archipiélagos y el resto del territorio.
Por todo ello y debido a que el hecho constituye una infracción administrativa tipificada en la Ley 42/2007 del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, se formula denuncia por comercialización de este tipo de plantas ante el Jefe del Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en Valladolid, quien también determinará el destino final de estas plantas.
Según el Código Penal en el artículo 333, estaría cometiendo un delito, el que introdujera o liberara especies de flora o fauna no autóctona, de modo que perjudique el equilibrio biológico, contraviniendo las leyes o disposiciones de carácter general protectoras de las especies de flora o fauna y se encuentra castigado con la pena de prisión de cuatro meses a dos años o multa de ocho a veinticuatro meses y, en todo caso, inhabilitación especial para profesión u oficio por tiempo de uno a tres años.