Csif volvió hoy a apoyar a los conductores del transporte urbano e interurbano en la huelga que han llevado a cabo ayer y hoy viernes, a nivel nacional, para exigir a la Seguridad Social que posibilite su jubilación antes de los 65 años. Este mediodía, unas 100 personas, mayoritariamente de Auvasa, se han concentrado ante la Delegación del Gobierno en Valladolid, después de que las 8.30 horas lo hicieran a las puertas de la empresa municipal.

Los conductores de Auvasa denunciaron, de nuevo, unos servicios mínimos "abusivos" del 70 por ciento impuestos por el Ayuntamiento de Valladolid, muy por encima de la media de otras provincias de España. El seguimiento de la huelga ha sido de un 90 por ciento en Valladolid y en Burgos, del 80 por ciento, según los datos de Csif, mientras que ha sido inferior en otras provincias de la Comunidad. 

Tras los acuerdos alcanzados el pasado fin de semana entre UGT y la patronal Confebus, el sindicato Csif considera que son "insuficientes" ya que deja sin fecha de presentación la propuesta para la aplicación de los coeficientes reductores para la edad de jubilación. Por ello, continuará apoyando todas las movilizaciones para conseguir la implantación del adelanto de la edad de jubilación sin merma económica. 

No en vano, consideró que el trabajo que llevan a cabo esos conductores "no puede desempeñarse con las mismas garantías de seguridad a partir de una determinada edad", además de recordar que los conductores se encargan de trasladar y desplazar a las personas por las ciudades y entre territorios, con la responsabilidad que conlleva la prestación de este servicio "esencial", "crucial" y "cotidiano" para la vida ciudadana. 

Csif señaló que el año pasado ya solicitó al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones la aplicación de esos coeficientes reductores por razón de la actividad para los conductores de autobuses de viajeros mayores de 60 años.