La Guardia Civil de Valladolid investiga a dos personas como posibles autoras de un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente al traficar ilegalmente con lodos procedentes de la depuradora de la localidad vallisoletana de Tordesillas. Según informó la Guardia Civil en un comunicado recogido por Ical, la investigación se inició cuando, durante la prestación de un servicio propio de la especialidad del Seprona, se sorprendió a un camión vertiendo de modo incontrolado lodos de depuradora de la EDAR de Tordesillas en una escombrera ilegal de la localidad de Rueda.
Los agentes procedieron a la comprobación del documento de seguimiento de los residuos, aportando el transportista un documento de identificación expedido por una empresa de gestión de residuos con sede en Burgos. Además, como compañía transportista figuraba una empresa dedicada al transporte de residuos con sede en Tordesillas. En el acto se verificó que la parcela que figuraba como destino de los residuos en el documento no coincidía con la parcela donde se estaba realizando el vertido.
Comenzó así una investigación policial con la denominación de operación 'Lodase', para la averiguación de los ilícitos penales que se pudieran estar cometiendo por los distintos intervinientes. Se realizaron inspecciones a la EDAR de Tordesillas, a una parcela agrícola situada en la localidad de Pollos, y a la parcela de Rueda donde se realizaron algunos de los depósitos ilegales de los lodos.
De igual modo, se solicitó documentación de la gestión de la citada EDAR al Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en Valladolid. Posteriormente, se tomó manifestación a varias personas que, de alguna forma, estaban relacionadas con estos vertidos.
Como resultado de la investigación, se concluyó por parte de los agentes instructores que dos de estas personas eran responsables de un delito de tráfico ilegal de los lodos de depuradora producidos por el EDAR de Tordesillas, y una de ellas con el agravante de otro delito de falsedad documental al haber falseado al menos 127 documentos de seguimiento de identificación de residuos durante el periodo comprendido entre junio de 2022 y junio de 2024, así como un contrato privado de aceptación de los lodos con un agricultor de la localidad de Pollos.
El hecho de realizar el vertido de esos lodos en un lugar no autorizado para ello está castigado con una pena de tres meses a un año de prisión, o multa de seis a 18 meses e inhabilitación especial para profesión u oficio por tiempo de tres meses a un año, y el de falsedad con las penas de prisión de seis meses a tres años y multa de seis a doce meses.
Por todo ello, se instruyeron diligencias policiales que han sido remitidas al Juzgado de Instrucción de Guardia de Valladolid y copia de estas a la Fiscalía de Medio Ambiente y Urbanismo de la Audiencia Provincial. Los hechos también han sido puestos en conocimiento de la autoridad competente en materia de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en Valladolid.