El ascenso está ahí. La posibilidad de conseguirlo es real. A solo dos victorias. Y el UEMC Real Valladolid Baloncesto quiere mantener vivo ese sueño derrotando este sábado (17.00 horas) al Zunder Palencia en la primera semifinal de la Final Four por subir a la ACB.

Los de Paco García acuden a la cita en el Coliseum de Burgos conscientes de que el favorito es el conjunto palentino. Fue segundo en la liga regular, perdiendo sólo siete partidos en toda la competición, uno en la primera vuelta. Pero dejando claro que, a pesar de ese papel, los pucelanos se van a dejar todo por la victoria. "Sólo tenemos que soñar y creer en nuestras posibilidades, si no, no tendría sentido ir", señalaba Romaric Belemene, que recuerda que saben lo que es ganar a Palencia: "Nos libera de presión no ser favoritos".

Ambos se han visto las caras en tres ocasiones esta temporada, dos en la LEB Oro y una en la Copa Castilla y León. La primera, en esa Copa, cayó del lado palentino en septiembre por 67-63; la segunda, en la apertura liguera en Palencia, también fue derrota pucelana por 75-65; mientras que la última, en Pisuerga en enero, significó la primera y única victoria, gracias a un 76-70.

Y a esta última se aferran los pucelanos. Aunque, como señala Jordy Juiper, "es un partido diferente a los de la temporada porque es sólo un partido, todo o nada, creo que somos el equipo más peligroso de la Final Four porque no tenemos nada que perder".

"Sería el colofón si ganamos la Final Four e increíble subir con Valladolid, un sueño", añade Pantzar, uno de esos jugadores diferenciales en este encuentro.

Con minoría en la grada -el club devolvió la mitad de los mil abonos que tenía-, pero con esa ilusión de devolver a Valladolid a la ACB, el UEMC Pucela quiere estar el domingo, a las 20.30 horas, en la final de Burgos.