La nueva ministra de Igualdad, la vallisoletana Ana Redondo, se ha despedido este lunes de su cargo como concejal socialista en el Ayuntamiento de Valladolid donde, según ha confesado, ha pasado los ocho años "más felices" de su vida en su responsabilidad como concejal de Cultura y Turismo en el anterior gobierno de coalición entre PSOE y VTLP que dirigía Óscar Puente, nuevo ministro de Transportes.
"Mi ciudad ha sido para mí un lugar en el que ir y volver constantemente. Valladolid es parte de mí y estos ocho años en la Concejalía de Cultura y Turismo han sido los más felices de mi vida", ha aseverado Redondo en una breve intervención en el Pleno ordinario del Ayuntamiento de Valladolid donde la hasta ahora concejal en el Grupo Socialista ha dejado su acta tras haber sido nombrada ministra de Igualdad en el Gobierno de coalición PSOE-Sumar.
Redondo se ha definido como "una servidora pública", tanto en su etapa en la Universidad de Valladolid, como en las Cortes de Castilla y León o en el Consistorio vallisoletano, y ha confesado que deja su cargo en el Ayuntamiento "con emoción" y convencida de que parte de ella queda en la institución municipal.
Respecto a su nueva etapa en el Ministerio de Igualdad, ha explicado que ha asumido la nueva responsabilidad "con honor y también con algún vértigo" y ha abogado en todo momento por la participación. "Como hice en el Ayuntamiento, mi puerta va a estar abierta para todo aquel que quiera reflexionar, debatir, compartir, denunciar...", ha asegurado en su reflexión.
Ana Redondo ha explicado también que el socialismo es "fundamentalmente" apertura, apoyo a los demás "e intentar cambiar las cosas para que sean mejores y para que la gente disfrute y viva de una mejor manera".
"Esto no es un punto y aparte, es un punto y seguido y por lo tanto confío en permanecer en las calles de mi ciudad estando muy atenta a todos los problemas que surjan y desde el Ministerio también apoyar lógicamente a las instituciones lógicamente también a este Ayuntamiento a mis compañeras y compañeros", ha concluido Redondo que ha asegurado que seguirá estando "muy cerca".
Redondo ha dedicado sus últimas palabras a todo el Grupo Municipal Socialista al que, según ha confesado, le une el trabajo "y una profunda amistad". "Sé que lo van a hacer estupendamente, sé que estarán al frente de todos los temas denunciando aquello que no funcione, pero también colaborando para que la cosas vayan mejor porque al final se trata de eso, la política es solucionar los problemas de la gente", ha concluido, una misión que ha asumido en primera persona: "Trabajar fuerte, trabajar duro para mejorar nuestra democracia, nuestra ciudad y también esta España nuestra que tanto queremos".