Hace más de siete años que el Ministerio del Interior tenía sobre la mesa el proyecto de trasladar la Jefatura Superior de Policía de Castilla y León, actualmente situada en la calle Felipe II, al terreno de Las Eras donde se ubicaba la histórica comisaría que fue derribada a principios del año pasado. Precisamente fue esa demolición la que parecía que iba a dar paso a la construcción de un nuevo edificio que sirviera como sede y sustituyera al de Felipe II, que tiene más de medio siglo de antigüedad y necesita algunas reformas. Juan José Campesino, anterior jefe superior de Policía de Castilla y León, reconoció públicamente en 2022 que esa idea todavía seguía viva por entonces.
Pero ya no es así. Para llevar a cabo ese proyecto, el Ministerio tenía previsto solicitar al Ayuntamiento la cesión de una parcela anexa, de superficie triangular, entre las calles Mieses y Sementera, que se integrase en las nuevas instalaciones. Sin embargo, hace algo más de un año que el Consistorio cedió este terreno a la Junta de Castilla y León para la construcción de 50 viviendas colaborativas en régimen de protección para jóvenes, dentro del proyecto Constelación, que contempla la cesión de terrenos municipales a otras administraciones y empresas para llevar a cabo proyectos de relevancia económica o social.
Este movimiento ha hecho que la idea que tenía el Ministerio de ubicar allí la futura Jefatura Superior de Policía se haya enfriado, al no poder disponer de la superficie requerida. Esto no significa que se haya descartado por completo, pero ya no es la idea principal, como ha venido siendo en los últimos años. Según fuentes consultadas por El Día de Valladolid, el anhelo por encontrar un lugar que se adecúe a las necesidades de la Policía Nacional sigue vigente, pero, más allá de eso, todavía no hay un proyecto concreto sobre cómo serán estas instalaciones. Y mucho menos plazos.
Acceso a la actual Jefatura Superior de Policía, en Felipe II. - Foto: Jonathan TajesEl terreno que el Ministerio del Interior posee en esta zona del barrio de Huerta del Rey tiene una superficie de unos 5.000 metros y se encuentra delimitado por las calles Sementera, Mieses y Trilla. En esta última vía se situaba el acceso a las instalaciones de la antigua comisaría, un edificio que se construyó en 1970 y que se derribó a principios del año pasado gracias a una obra que contó con un presupuesto de casi 240.000 euros. Estas instalaciones apenas tenían actividad antes de su derribo. Tan solo acogían una oficina de denuncias que funcionaba en horario de mañana y tarde de lunes a viernes, además de algunos despachos para sindicatos policiales y agentes de la Unidad Especial de Guías Caninos (UEGC), pese a que los perros se encontraban en unos caniles prestados en Villanubla. Después del derribo, los sindicatos se trasladaron a la comisaría de Parquesol, la oficina de denuncias se cerró y los guías caninos fueron a la nueva sede que para esta especialidad estrenó la Policía Nacional hace unos meses en la calle Padre Bernardo Hoyos, en la zona de El Peral.
La parcela anexa, a la que aspiraba el Ministerio, tiene una superficie de algo más de 3.500 metros. Actualmente se encuentra cubierta de vegetación a la espera de la adjudicación de las obras del edificio que acogerá las 50 viviendas colaborativas para jóvenes.
La Policía Nacional cuenta con cuatro instalaciones en Valladolid: la Jefatura Superior de Felipe II, la comisaría de Las Delicias, la de Parquesol y la Unidad Especial de Guías Caninos de El Peral.