CyL planifica las ciudades del futuro bajo la Agenda Urbana

SPC
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El consejero Suárez-Quiñones anima a implantar las agendas urbanas y seguir el ejemplo de diputaciones y municipios que ya tienen un plan de acción local

Suárez-Quiñones presenta las directrices de la Agenda Urbana, junto a María Pardo, Ángeles Armisén y José Luis Rivas. - Foto: Ical

El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, presnetó ayer las directrices para la adaptación a Castilla y León de la Agenda Urbana Española, un documento de «planificación» que pretende servir a municipios y provincias de «marco estratégico» en el que apoyar sus planes y proyectos en diez campos. Una traslación planteada desde el Ejecutivo regional que pretende ser una «hoja de ruta» para ayudar a que las «ciudades grandes, pequeñas e intermedias» de Castilla y León tengan una «forma de planificar su futuro» y que este sea «seguro, sostenible y que dé más calidad de vida a sus habitantes». Así lo explicó durante una jornada con alcaldes celebrada en Valladolid. El evento sirvió, dijo, para informar sobre la «adaptación e impulso» de la Agenda Urbana Española en Castilla y León, un documento aprobado en 2019, según informa Ical.

En resumen, este «documento de planificación estratégico, que no es una norma», supone «una hoja de ruta que pretende buscar» en los municipios una «forma de planificar su futuro para que sea seguro, sostenible y que dé más calidad de vida a sus habitantes». En este sentido, ahondó en que deben ser planificaciones «a medio y largo plazo, porque está claro y demostrado que las ciudades proyectadas, los municipios con proyecto, tiene más éxito que los que no lo tienen». El consejero explicó que estas directrices pretenden ser un «instrumento a disposición de diputaciones y ayuntamientos para favorecer esa planificación y que busquen en un plan de acción local proyectos de futuro, retos, oportunidades, problemas o recursos, presupuesto y mayores garantías para optar a ayudas, tanto europeas como nacionales y de la Junta».

¿Cómo me afecta?

También indicó que la ciudadanía se «puede beneficiar en que la planificación determine si el pueblo puede engancharse a una red de calor, si hay oportunidad de nuevas energías, vivienda o rehabilitación energética». «Todo eso al final es economía, modernidad, bajar la factura de servicios. En definitiva, se planifican cosas del día a día de los ciudadanos», comentó Suárez-Quiñones, quien apuntó que el trabajo se ha realizado con el Instituto de Urbanística de la Universidad de Valladolid.

En este sentido, José Luis de las Rivas, en representación de este Instituto, ensalzó la participación como uno de los principios de la Agenda Urbana. «Los trabajos se hacen colaborando con los habitantes, que se convierten en agentes activos de la transformación de sus propios municipios. Esta es la idea, es fácil decirlo y difícil hacerlo. Yo llevo 35 años dedicado al urbanismo y a la ordenación del territorio y lo he visto pocas veces, pero si se consigue el resultado es excelente».