El Pucela reina en la locura del José Zorrilla (3-2)

M.B.
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Sergio Escudero anotó el gol de la quinta victoria consecutiva del Real Valladolid en el minuto 97. El cuadro blanquivioleta perdía ante el Mirandés por 0-1 en el 80 y creyó en el triunfo hasta el final. Ya está en puestos de playoff

Sergio Escudero celebra el 3-2 ante el Mirandés. - Foto: LaLiga

El Real Valladolid reinó en la locura final del segundo derbi regional en siete días. Logró su quinta victoria consecutiva en el minuto 97, gracias a un gol de su capitán, Sergio Escudero, que supuso el definitivo 3-2 ante el Mirandés. Pero es que poco antes, en el 80, perdía 0-1. La locura se resume en que fue capaz de darle la vuelta al marcador en cinco minutos, gracias a un doblete de Sylla; vio cómo volvía la igualada en el añadido para que Escudero enganchase un chut perfecto sobre la bocina para dejar los puntos en casa. Y con ellos, meterse ya en puestos de playoff.

Pezzolano regresó a los cinco defensas de inicio, con Boyomo, Gustavo Henrique y David Torres. Y colocó a dos delanteros, Sylla y Marcos André, más el apoyo de Kenedy, el primero en avisar antes del minuto 6 desde lejos.

El Pucela mandó. Con posesión y paciencia en los primeros instantes para buscar la portería visitante. Aunque también con lanzamientos lejanos, como los de Monchu y Sylla en el 13. Uno desde su campo y el otro llegando en velocidad al filo del área. El primero no sorprendió a Ramón Juan y el segundo se fue fuera por poco. El Real Valladolid ya estaba avisando.

Sylla celebra uno de sus dos goles ante el Mirandés.Sylla celebra uno de sus dos goles ante el Mirandés. - Foto: LaLiga

Pero el Mirandés fue poco a poco haciendo que sus intenciones, que no pasase nada, que el juego fuera lento y con continuos parones, se impusieran. Así se fue llegando a la media hora de juego. Con otra opción de Kenedy, que no pudo aprovechar un error del portero visitante, que el propio Ramón Juan rectificó; y una, la primera clara, de los visitantes, con un cabezazo de Durdov entre los dos centrales que se fue fuera. 

Pero la más clara, aparte de esa de Kenedy, fue de Escudero, ya en el minuto 30. Desde fuera del área con un buen chut que hizo volar al guardameta rojillo, mandando el cuero a saque de esquina. Precisamente los córners son una de las armas de esta temporada del Pucela. Y en uno, en el 37, Sylla volvió a rondar el gol pero una vez más Ramón Juan lo evitó. No estaban siendo buenos minutos de juego porque el Pucela no conseguía meter ritmo al duelo. Con todo, las ocasiones iban llegando.

Pero faltaba el gol. De nuevo estuvo cerca. Ya en el tiempo añadido. Gracias a una buena acción en parado de Sylla, que hizo lucirse al portero del Mirandés, el mejor de su equipo en la primera mitad. Al descanso mucha posesión pero cero goles. No era suficiente.

Y menos cuando nada más salir de vestuarios el Mirandés sí supo acertar con el marco local. En una acción de Carlos Martín por banda derecha, que superó a David Torres y asistió a Durdov para que el delantero solo tuviera que empujar. Jarro de agua fría para un Pucela al que la posesión no le estaba valiendo. 450 minutos después John Víctor volvía a encajar. Y era el momento de ver la reacción de los de Pezzolano, hasta ese momento muy lentos en ataque.

El juego no cambió. El Real Valladolid seguía teniendo la posesión y también las llegadas. Pero sin acierto. Ramón Juan le quitó un balón que llegaba franco a Marcos André en el 58.

Por entonces, había que empezar a mirar al banquillo. Pezzolano decidió apostar por Iván Sánchez y Jony Montiel, quitando a Gustavo Henrique y a Kenedy, volviendo al 4-4-2. Y el dominio cada vez fue más claro. El Mirandés estaba ya incrustado atrás, guardando el 0-1.

Tras unos minutos de agitación gracias a Montiel e Iván Sánchez, el juego volvió a ser lento y cansino. Demasiado sencillo para un equipo en bloque bajo muy cerrado. El Pucela no encontraba la forma de meterle mano al rival. Todo era muy previsible.

Pero como el fútbol no entiende de momentos, el empate llegó en uno de esos centros que parecen que no generan peligro. Era el minuto 82 y Luis Pérez la puso por la banda derecha, Marcos André saltó más que todos, la rozó para que le cayese a Sylla que, con pausa la amortiguó y la colocó con la derecha lejos de defensa y portero.

Con el 1-1, Pezzolano no se conformó y metió a Cedric por Juric. Y acertó. El cambio iba a ser por Sylla pero le mantuvo en el campo. Y el '7' respondió con el 2-1 poco después. Esta vez de cabeza tras una gran jugada de Iván Sánchez por banda derecha, recorte y centro para que Sylla la rematase de cabeza a la perfección.

El triunfo se acercaba a Zorrilla. Pero aún quedaba. 8 de añadido. Y esa locura. En el primero, de nuevo el Mirandés aprovechaba su ocasión. Segunda en esta mitad. Con la defensa local descolocada, con un pase al hueco, rozado por una cabeza blanquivioleta y con un mano a mano de Gabriel Martínez. El delantero acertó ante John Victor. El mazazo parecía definitivo. Parecía.

Porque en el 97 se iba a desatar la locura en Zorrilla con un centro de nuevo por la derecha, toque atrás de Sylla y golazo de Escudero para alcanzar la quinta victoria consecutiva. El Pucela ya está puestos de playoff.

Ficha técnica:

3- Real Valladolid:
John Víctor; Luis Pérez, Gustavo Henrique (Iván Sánchez, m.63), Boyomo, David Torres, Escudero; Monchu, Juric (Cedric, m.82), Kenedy (Joni Montiel, m.63); Marcos André (De la Hoz, m.90), Sylla.

2- C.D Mirandés: Ramón; Barcia, Barbu, Pablo Ramón; Rubén Sánchez (Diego Moreno, m.60), Reina, Tomeo, Juan María; Álvaro Sanz (Gómez, m.84), Durdov (Godoy, m.60), Carlos Martín (Gabri Martínez, m.67).

Goles: 0-1, m.50: Durdov. 1-1, m.82: Sylla. 1-2, m.87: Sylla. 2-2, m.91: Gabri Martínez. 3-2, m.98: Escudero.

Árbitro: Lax Franco (Comité murciano). Mostró cartulina amarilla a Escudero (m.39), Montiel (m.85), del Real Valladolid y a Barbu (m.40), Gabri Martínez (m.91), del Mirandés.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la décima jornada de LaLiga Hypermotion, disputado en el estadio José Zorrilla ante 18.473 espectadores, con el presidente del Real Valladolid, Ronaldo Nazário, en el palco.