El Caja Rural Real Valladolid Baloncesto firmó una temporada perfecta con un histórico 24-0. 24 partidos, todos ellos contados por victorias para lograr el título de campeones de Primera Nacional y lograr de nuevo el ascenso a Liga EBA, la cuarta división del baloncesto español.

Con una plantilla formada casi de manera íntegra por jugadores vallisoletanos, canteranos, de formación del club (como los técnicos), el filial blanquivioleta ha rubricado una campaña 2023/2024 para la historia de la entidad y de la competición actual. Y el broche ha llegado este martes 23 de abril, precisamente en el Día de Castilla y León, con una victoria muy solvente ante la Universidad Pontificia de Salamanca.

Ante el equipo salmantino, las ardillas llegaban con varias bajas, cortos en la rotación, pero una formidable puesta en escena sirvió para encarrilar el partido. Varios triples del cuadro local abrieron brecha a las primeras de cambio, lo que sumado al buen nivel defensivo permitió escaparse ya en el primer cuarto. Aunque las tornas se igualaron en el segundo, con los forasteros más entonados atrás, el botín al descanso ya era de 15 puntos (41-24). Lejos de relajarse y de despistes, el Caja Rural RVB volvió de vestuarios con una marcha más que el rival y ya dejó el partido visto para sentencia antes del último asalto. Sin contratiempos ni giros en el guion, los pupilos de David Enciso, Álvaro Díaz y Jesús Bartolomé sellaron la victoria (88-54), la 24ª de la temporada, y rubricaron la temporada perfecta e inmaculada.

Al término del encuentro, el del broche dorado a un año de matrícula de honor, el Caja Rural Real Valladolid Baloncesto recibió el trofeo de campeón y medallas de la mano de Elisa Aguilar, presidenta de Federación Española de Baloncesto; Óscar Castañeda, Presidente de la Federación de Baloncesto de Castilla y León; y de Enrique Peral, director general del club.