El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, descarta el ofrecimiento del ministro de Transportes, Óscar Puente, de mejorar el convenio de la integración con la inclusión de más pasos, como el de Daniel del Olmo, para evitar la trabas del Ayuntamiento a la demolición del viaducto del Arco de Ladrillo. Carnero se remitió a la contestación del concejal de Urbanismo, Ignacio Zarandona, al ministro este lunes, cuando la realizó el ofrecimiento tras la visita a las obras de la nueva terminal de mercancías en Páramo de San Isidro.

El alcalde apuntó que Zarandona reiteró al ministro que el equipo de Gobierno "quiere lo mejor para la ciudad y nadie duda que lo mejor es el soterramiento". Esto zanja la posibilidad de incluir en el convenio de la integración el arreglo del viaducto de Daniel del Olmo, que lleva más de un año cortado al tráfico pesado por problemas en su estructura. 

La propuesta de Puente se realizó tras dar a conocer el Ayuntamiento un requerimiento para que Adif anule el contrato para demoler el viaducto de Arco de Ladrillo, que ya está listo para licitar por la sociedad Valladolid Alta Velocidad (VAV). En el escrito se rechaza el proyecto del nuevo paso subterráneo con cuatro carriles para el tráfico y otro inferior para peatones y bicicletas en Arco de Ladrillo. En su petición, el Consistorio pide diseñar uno nuevo y que no se demuela el actual viaducto, entre otros motivos por el "caos de tráfico" que se generaría en la capital.

La construcción de este nuevo paso inferior sería determinante para avanzar con el proyecto de la integración y frenar la idea de Carnero de recuperar el proyecto de soterrar las vías. En esa línea, el ministro pidió al edil que el equipo de Gobierno tuviera "altura de miras" y que fueran proactivos en la búsqueda de soluciones pensando "en lo mejor para la ciudad". Y reiteró en su discurso oficial que soterrar es "imposible" desde 2017, cuando se anuló el anterior convenio y se firmó la integración ferroviaria, que deberá concluir, según el cronograma previsto, en 2030.

En este sentido, subrayó que el proyecto del paso subterráneo de Arco de Ladrillo ya está listó para la licitación de la obra y con dinero para pagarlo en la "caja" de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad (VAV). Y mostró su extrañeza porque su sucesor haya optado por la fórmula del requerimiento a Adif, ya que recordó que el Ayuntamiento podrá defender su posición en la próxima reunión de la sociedad VAV, de la que es socio, y que previsiblemente se celebrará en octubre. En esa misma reunión también se podría plantear oficialmente la propuesta de mejora del convenio por parte del Ministerio de Transporte.