La riada del Pisuerga, que mantuvo el caudal del río durante más de diecisiete horas en estado de alarma hace dos semanas, obligará a reponer al menos una tercera parte de la arena de Las Moreras. Las tareas de recuperación de ese entorno fluvial comenzarán en aproximadamente un mes, pero el Ayuntamiento de Valladolid hace ahora una estimación de cara a los trabajos, a la compra del material necesario y al presupuesto previsto. Sin embargo, fuentes municipales no descartan que estos metros cúbicos de arena pudieran ser incluso más, debido a que, como indican los técnicos, hasta que no comiencen los trabajos sobre el terreno no podrá calcularse una cantidad definitiva. En las zonas ajardinadas, además, los daños no han sido demasiado cuantiosos porque el caudal se estabilizó a la altura de la playa. No fueron destacables, excepto en un punto: en el parque Ribera de Castilla, donde un camino se agrietó y el paseo se ha hundido.

Las crecidas del río supondrán un desembolso imprevisto para el Consistorio.La Fundación Municipal de Deportes tendrá que afanarse más de lo habitual en remozar la playa de Las Moreras para habilitarla de cara a la inminente temporada de baño. Unas tareas que les obligarán a hacer un desembolso económico bastante mayor, aunque aún no está cuantificado. Un trabajo para reponer la arena que el Pisuerga se ha llevado, además del saneamiento correspondiente con el desbroce vegetal del terreno, así como la citada reposición con varias toneladas procedentes de los pinares de Tudela de Duero y la desinfección de la arena, filtrado y arado. En total, devolver a Las Moreras su aspecto con una superficie de baño de 8.000 metros cuadrados (la orilla mide 240 metros).

El servicio municipal de Limpieza también hará su parte con la higienización del entorno, mientras que el área de Parques y Jardines repondrá la masa vegetal perdida, que conlleva la limpieza, el desbroce y la eliminación de vegetación atrancada y acumulada en las zonas verdes del entorno. Donde tendrán más trabajo, será en un tramo de unos 15 metros lineales y cinco metros de ancho de un camino del Ribera de Castilla que se agrietó con el discurrir del invierno y que con la riada se ha hundido hasta el punto de que el terreno es intransitable y peligroso. La zona está ahora perimetrada desde entonces y su sujeción comenzará en los próximos días con un presupuesto de unos 10.000 euros.

Parques y Jardines, asimismo, fue previsor al desmontar del entorno fluvial cuatro instalaciones de bombeo de agua, cuatro de los sistemas con los que se extrae el agua para el riego de distintas zonas verdes de la margen izquierda del Pisuerga, entre las que cabe significar el Campo Grande. Son unas infraestructuras, cuyo coste total supera los 600.000 euros, y que se salvaron al ser retiradas a tiempo de sus localizaciones de Ribera de Curtidores, Las Moreras, Ribera de Castilla y Soto de la Medinilla. En la margen derecha, por su parte, no fue necesaria su retirada porque están a una altura superior a la crecida alcanzada por el río. Los servicios municipales también se deberán de afanar en limpiar las zonas deportivas y los circuitos de paseo de baldosas y hormigón.