La Semana Santa terminó ayer por la tarde con retenciones en varios puntos de la provincia que, en el caso concreto de la Autovía del Noroeste (A-6), llegaron a alcanzar los 40 kilómetros, entre Vega de Valdetronco y Medina del Campo, pasando por Tordesillas, siempre en sentido sur, es decir, de todos los vehículos que viajaban desde el norte y el oeste del país hacia Madrid y el sur.
Este pico de atascos que llegó a ser de 40 kilómetros se dio a eso de las 20.15 horas y se mantuvo durante una hora, para después ir decreciendo. Fue el punto álgido de una tarde en la que, desde un primer momento, tanto la A-6 como la A-62 (Autovía de Castilla) sufrieron retenciones de cierta importancia, según la información recabada por este periódico en fuentes de la DGT.
A las 17.00, cuatro kilómetros en la A-6, en la zona de Medina, y doce en la misma autovía, pero entre Rueda y Tordesillas. Al filo de las 18.30 horas, se mantenían los problemas en el entorno de las localidades de Medina del Campo y Rueda (aquí la retención era ya de unos 17 kilómetros) y surgía un atasco de poco más de cuatro en la misma Autovía del Noroeste, a su paso por Mota del Marqués; en la A-62, además, eran más de tres los que se generaban al paso por Tordesillas, punto de confluencia de ambas vías y la A-11. Para las 19.30 horas, las retenciones en Medina del Campo ya eran de nueve kilómetros y en Mota, de diez.
Nivel amarillo.
Pero lo peor llegó a partir de las 20.15 horas, cuando el atasco en la A-6 se fue hasta los 40 kilómetros, desde los términos municipales de Vega de Valdetronco y Medina del Campo. La DGT estableció nivel amarillo en todos los casos registrados en la provincia, es decir, circulación lenta con paradas intermitentes.
A pesar de los diversos puntos de la red provincial en los que se registraron atascos y de la lluvia que presidió la tarde -en la capital se registraron, por ejemplo, algo más de tres litros en el tramo final de la tarde, no hubo que lamentar accidentes.
Dos muertos en la región.
En el resto de Castilla y León sí que hubo víctimas mortales durante estos días de Semana Santa. En concreto, dos: un conductor que falleció el domingo 24 en Segovia, en el término de San Ildefonso; y un motorista que perdió la vida el sábado en la localidad abulense de Cuevas del Valle, informó Ical.
Esto supone tres muertos en el asfalto menos que en la misma operación especial del año 2012. El dispositivo establecido por la DGT permanece activo hasta esta medianoche.