El Caja Rural CPLV y el Munia Panteras arrancarán este fin de semana la última parte de sus respectivas Ligas. Lo harán con un doble compromiso en tierras mediterráneas, donde tratarán de defender sus segundas posiciones y, de paso, apurar opciones de acabar primeros. El equipo masculino visitará el sábado (19.15 horas) la pista de un siempre complicado HC Castellón; mientras que el femenino jugará, también el sábado (19.00 horas), en la del CP Vila-Real.
A falta de cuatro jornadas para el final de la Liga regular, el Caja Rural CPLV ya tiene asegurada su presencia, una temporada más, en el playoff por el título. Será primero o segundo casi con toda seguridad, ya que sólo le puede cazar el tercero, pero para ello debería darse una carambola de resultados. Así que su intención es hacer pleno en las cuatro jornadas y esperar un pinchazo del Molina, líder empatado a puntos con los pucelanos. Este sábado visita la pista Gaeta Huguet de un equipo, el HC Castellón, que es cuarto y que en su feudo solo ha perdido un partido, y en la prórroga, ante el Molina. Patrik Sebek se llevará a los habituales, salvo Eloy Valls y Miguel de Saja, para buscar los puntos ante los hermanos García Edo, Isaac y Nicolás, o el sueco Viktor Lindell.
A pocos kilómetros de Castellón, en Oropesa, el Munia Panteras no puede permitirse ni un traspié más si quiere concluir en la segunda posición. Ahora hay un triple empate entre Tucans, Skulls Almàssera y el cuadro vallisoletano, con un punto de ventaja sobre el Tres Cantos. La primera plaza ya es imposible, con lo que el objetivo es acabar segundas. El primer rival será el CP Vila-Real, penúltimo con sólo dos victorias, aunque la última en la pista del Rubí en la prórroga, con su portera, Paqui Aparici como destacada. Las vallisoletanas viajarán sin tres de sus jóvenes, Inés Ruiz, Ainara Carranza y Tamara Vaidean, que tienen importante compromiso con el filial en la sede de la Liga Oro femenina que se celebrará en Íscar.