La Gerencia Regional de Salud materializará en octubre la ampliación del programa de cribado de detección de cáncer de mama mediante una mamografía a las mujeres de 69 a 74 años. En estos momentos, la prestación va de los 45 a los 69 años, y existe el compromiso de extenderlo a esta nueva horquilla poblacional, al tratarse de uno de los cánceres con mayor incidencia entre la población femenina. El consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, explicó que la ampliación supondrá unas 125.000 mamografías anuales, de las que unas 5.000 se corresponderán con la incorporación de este grupo. «Cuanto antes se detecte, como digo, es mucho mejor para el pronóstico de la enfermedad», incidió. De hecho, Vázquez puso esta fecha durante la inauguración de la nueva sede de la Asociación Española Contra el Cáncer en Medina de Rioseco.
Asimismo, se materializó la renovación del convenio entre la Consejería de Sanidad, la Diputación de Valladolid y la AECC en Valladolid, para facilitar la participación de la mujer rural en el programa de detección precoz del cáncer de mama y otras actividades. «Es fundamental que se acuda a los llamamientos que se hacen para hacer la mamografía», subrayó el titular de Sanidad.
Por otro lado, el consejero indicó que el plan de contingencia de Sanidad para afrontar la demanda en Atención Primaria, que cuenta con una inversión de 11,5 millones, funciona, según recogió ayer Ical. Es más, recordó que se reforzará, «sin trastocar» su formación, con los médicos internos residentes (MIR) de cuarto año, que finalizarán en septiembre a causa del covid, pero que, como medida transitoria, podrán incorporarse y realizar trabajo autónomo, siempre supervisados con un médico especialista.
«De momento no tenemos constancia de que haya problemas en la contratación de enfermeras. Si bien es verdad que no sobran», dijo Vázquez, y reiteró que van «a tocar todos los puntos» de los que disponen «para poder solventar el verano».
Nueva especialidad
Además, el consejero consideró una «noticia excelente» que la petición histórica de crear la especialidad de Urgencias y Emergencias se convierta en realidad con su aprobación en Consejo de Ministros. No obstante, lamentó que de nuevo «llegue tarde», pese a poder ayudar a aliviar el déficit de médicos de Familia, y se dilate en el tiempo, puesto que no se podrán convocar plazas hasta 2026.
Vázquez recordó que se trata de una demanda histórica en la que Castilla y León «ha participado de modo activo», desde su inicio, para lo que creó un frente común, junto a Galicia, La Rioja y Comunidad Valenciana para impulsarla, hasta el punto de contar con grupos de trabajo en el seno del Ministerio de Sanidad. La Comunidad apoyó desde el primer momento la creación de esta especialidad por su cuerpo de conocimiento, que lo justifica, y para evitar el deslizamiento de médicos de Familia a estos servicios.