Algo más de cuatro meses de competición, 19 jornadas ligueras y alguna eliminatoria copera después, Rubi repitió un once. No lo había hecho en toda la temporada. Por unas u otras razones, el técnico del Real Valladolid siempre había introducido uno o varios cambios en su equipo inicial, pero el domingo en Zaragoza todo cambió. El de Vilassar de Mar alineó de salida a los mismos once futbolistas que en el último partido de 2014 habían goleado al Barcelona B. Con idéntico sistema, 1-4-3-3. Y el Real Valladolid volvió a ganar, y con solvencia.
Varas, Chica, Valiente, Rueda, Peña, Leao, Timor, Rubio, Mojica, Óscar y Jeffren. ¡Eureka!
Pero cuando Rubi ya tenía o parecía haber encontrado su once, no podrá, al menos, el domingo mantenerlo. André Leao vio la quinta amarilla de la temporada y no jugará ante el Deportivo Alavés, con lo que el entrenador se verá obligado a introducir de nuevo un cambio. El portugués es uno de los fijos y solo se ha perdido un partido en lo que va de campaña, siendo hasta el momento el que más minutos acumula, con 1.592 jugados.
Las dudas son muchas y variadas. Sastre continúa entre algodones por una sobrecarga muscular y Álvaro Rubio sufrió un corte en la tibia derecha en Zaragoza, con lo que mantener ‘su’ sistema dependerá de la evolución de estos dos jugadores.
Además, Jonathan Pereira ya acumulará más de una semana de trabajo en Valladolid y su llegada fue avalada por todos, entendiendo que su presencia es vital en el equipo, aunque los tres de arriba, Mojica, Óscar y Jeffren parece que ahora están en forma, sobre todo los dos primeros.
Dudas que tendrá que resolver un Rubi al que, hasta el momento, no le había importado tener que hacer cambios en sus onces.