Cambio de tendencia en el mercado del vino de la provincia. Las denominaciones de origen han pasado un década de crecimientos en las ventas y expansión en los mercados. Han conseguido aumentar sus producciones en superficie y hacerse un hueco en países y mercados emergentes, pero parece que este año está trastocando esta buena marcha genérica del vino vallisoletano. Las ventas de las denominaciones de origen Ribera del Duero, Rueda y Cigales están registrando un frenazo de consideración y en los cuatro primeros meses del año las botellas vendidas han sido 75.062.714, casi tres millones menos que los 77,7 que se alcanzaron durante el mismo periodo del año pasado.    

La caída ha sido generalizada, aunque evidentemente es menos notable en el caso de Cigales, al contar con menos cuota de mercado. El Consejo Regulador entregó a las bodegas de Ribera del Duero 32,7 millones de contraetiquetas (un distintivo antifalsificación que certifica que el vino ha sido calificado por el Consejo Regulador), lo que equivale a botellas de vino vendidas. Esta cifra representa un descenso del dos por ciento en comparación con los 33,4 millones del pasado año. Esta caída es todavía más pronunciada si se tiene en cuenta que un año antes, en 2022, se alcanzaron los 34,7 millones de contraetiquetas en los cuatro primeros meses del año. 

El presidente del Consejo Regulador de Ribera, Enrique Pascual, tiene claro que la situación de «incertidumbre» mundial que vive actualmente el mercado es la causa fundamental que está motivando esta caída de las ventas y pidió esperar uno o dos meses más para conocer cómo acabará el año. «Nosotros ya podemos hacernos una idea con las ventas de unos cinco meses, ahora todavía es un poco prematuro». Eso sí, el responsable de la denominación destacó que este periodo de guerras, con mercados cerrados e incertidumbre sobre la situación económica está afectando a todos los sectores, y el vino no es una excepción. Asimismo, indicó que el canal Horeca, es decir, el de restauración, es el que más ha caído durante este tiempo. «Estamos notando que es el que más ha caído».

Se debe tener en cuenta que durante el año pasado, los vinos europeos ganaron cuota frente a los del nuevo mundo en un difícil 2023 en el que los 11 primeros proveedores perdieron volumen, según el informe Principales Exportadores Mundiales de Vino publicado por OIVE.

rueda. ?Rueda se convirtió el año pasado en la denominación que ocupa el primer puesto dentro de los vinos blancos de calidad en el conjunto nacional, con un 42,3% del mercado total en este segmento, según el informe que acaba de publicar la consultora Nielsen IQ respecto al ejercicio de 2023. Una situación de privilegio que podría truncarse en este 2024. Las contraetiquetas proporcionadas entre enero y abril fueron 40,9 millones, dos menos que en el año anterior. Rueda ha experimentado una subida exponencial cada año en el número de botellas comercializadas y también ha ido incrementando el número de hectáreas dentro de la DO en algunos años pasados. Ahora, al menos por el momento, ve cómo las ventas se han detenido y habrá que esperar para comprobar si las bodegas son capaces de sacar al mercado toda la producción que almacenan. En 2022, durante el primer cuatrimestre del año se llegó a los 38,6 millones.  

El presidente de la DO, Carlos Yllera, indicó también que la situación del mercado no es propicia para que aumente la venta de vino, pero recordó que Rueda fue la única denominación que fue capaz de crecer durante el año pasado. 

Situación diferente se registra en? Cigales. Las 30 bodegas de la denominación de origen han mantenido durante los últimos años  prácticamente estancados en las mismas cifras y en este 2024 la situación continúa siendo la misma. En el primer cuatrimestre se han vendido 40.000 botellas más, pero durante los tres últimos años han sido los 1,3 millones habituales.