Carnero replica a Puente por acusarle de homofobia

D. V.
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"Si le queda algo de honestidad, sabe que yo no soy homófobo", subraya el actual alcalde tras los cruces de declaraciones por la polémica sobre la colocación de banderas LGTBI en edificios públicos

Imagen de archivo de una bandera LGTBI en la Casa Consistorial de Valladolid.

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, invitó este martes al ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, a "superar el berrinche" por no haber obtenido de nuevo el bastón de mando en el Ayuntamiento tras los comicios de 2023, motivo que, consideró, está detrás de su calificativo de este lunes en las redes sociales, en las que tachó al regidor de "homófobo" y de que la colocación de la bandera LGTBi cuando era presidente de la Diputación, era "puro postureo".

"Es evidente que sigue anclado en un berrinche porque los ciudadanos de Valladolid no apostaron por él. No lo ha superado y yo creo que ya es hora de que lo supere, que ese berrinche lo supere. Yo homófobo no soy, él no lo sé", sembró Carnero, tras conocer ayer un auto del Tribunal Supremo que daba la razón a la institución provincial para poder colocar este símbolo arcoíris y anunciar que el Ayuntamiento no colocaría banderas.

Al respecto, reprochó a Puente: "Si le queda algo de honestidad, que espero que sea así, sabe que yo no soy homófobo. No lo era antes ni lo soy hoy. Lo que hemos puesto de manifiesto es que nosotros, en el balcón oficial del Ayuntamiento, no vamos a poner ningún tipo de bandera distinta a las oficiales".

En todo caso, recordó que en dos ocasiones se ha iluminado la fachada del Ayuntamiento con los colores del movimiento LGTBI, así como la Cúpula del Milenio, por tanto "de homofobia nada". "Él lo sabe y se dedica a lo que no se tiene que dedicar. Lo que tiene que hacer es a defender los intereses de los españoles, incluidos los vallisoletanos, y tener un compromiso claro y evidente con la igualdad", apuntó Carnero.

En este sentido, puso como ejemplo "la igualdad de las mujeres, porque en dos ocasiones no recriminó la ley del Solo Sí es Sí en el Ayuntamiento de Valladolid"; y fue más allá para pedirle compromiso con "el hecho de que los vallisoletanos tengamos las mismas oportunidades que tienen los catalanes" y, por tanto, que "rechace el cupo catalán".