Agentes de la Policía Nacional de Valladolid detuvieron el pasado 27 de noviembre a un varón como presunto autor de un delito continuado de hurto de un total de 41 contadores, valorados en 4.000 euros, tras formalizarse 24 denuncias entre el 17 de octubre y el 11 de noviembre, según fuentes policiales.

Todas las denuncias eran idénticas puesto que las víctimas informaban de la sustracción de los contadores de agua de sus domicilios, percatándose de ello al comprobar que no tenían agua, motivo que les llevaba a corroborar que había sido sustraído. 

El pasado 3 de noviembre, un vecino vio a un varón manipulando los contadores, identificándose como técnico de una empresa suministradora de agua, quien manifestó estar cambiando alguno de los aparatos. Minutos después, los vecinos se percataron de que no tenían agua, comprobando que faltaban cuatro contadores en ese inmueble. 

Por ese motivo, los agentes de la Policía Nacional iniciaron una investigación para poder determinar la autoría de los hechos. Las gestiones realizadas les llevaron a identificar a un varón que ya fue detenido el pasado 26 de septiembre por el hurto de contadores. 

En ese caso fue descubierto firmando albaranes de retirada de los citados aparatos sin autorización de la empresa para la que trabajaba como fontanero. Desde el 21 de junio, momento en el que comenzó a trabajar, hasta el 18 de septiembre, que fue despedido, se habrían sustraído 1.313 contadores de agua valorados en 75.000 euros.