Jordi Masip, Sergio Escudero, Raúl Moro y Stipe Biuk, además de Álvaro Negredo y Lucas Oliveira, terminan su vinculación con el Real Valladolid este domingo, 30 de junio. Pero, mientras por los dos segundos parece que no pujará el club que preside Ronaldo Nazário, por los cuatro primeros hay dudas. Y todas las marca el límite salarial, que aún no se conoce en las oficinas del José Zorrilla y que impide que haya movimientos.

De los cuatro 'interesados', dos tienen opciones de seguir, Escudero y Moro. Aunque mientras que con el primero será cuestión de llegar a un acuerdo económico, por el segundo el club o bien hace efectiva la cláusula de compra, cifrada en 2,5 millones, con la Lazio o bien espera a que pase el 30 de junio y entra a negociar con el club italiano una rebaja en el dinero (en pugna ya con otros clubes), toda vez que ya ha tenido que desembolsar más de 7 millones por la adquisición obligatoria de Meseguer (2,5), Ferreira (1), Amath (2,5), Juric (1,5) y Sylla (se desconoce la cantidad). Menos claro están los casos del capitán, Masip, titular con todos los entrenadores. Mientras que la cláusula de Biuk, en torno a los 4 millones, hace que sea complicada su continuidad en Zorrilla, aunque el contrato tiene alguna indefinición en esa cláusula y no se tiene claro si es o no obligatoria.

La plantilla apurará en los próximos días la última semana de vacaciones antes de comenzar la pretemporada. Lo hará con 16 jugadores que ya estaban la pasada temporada en la primera plantilla más los cedidos que retornan este verano: Aceves, Kike Pérez, Amallah, Tunde y Machis, que lo hará más tarde por la disputa de la Copa América. A ellos se sumarán los canteranos que Pezzolano y su cuerpo técnico estimen oportuno.

Mientras, la Dirección Deportiva, encabezada por Domingo Catoira, sigue trabajando en los perfiles de futuros refuerzos, sin cerrarse por ahora ninguno. El hecho de que las temporadas acaben el 30 de junio invitaría a pensar en algún movimiento la próxima semana, aunque en este caso ocurre como en el de las renovaciones, el límite salarial lo paraliza todo.