La UCI del Clínico, certificada en la gestión de riesgos

Ó. F.
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La Unidad de Cuidados Intensivos del centro hospitalario es la primera de la Comunidad que consigue esta acreditación después de un intenso trabajo para corregir posibles incidencias

Elena Bustamante, responsable de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Clínico Universitario de Valladolid. - Foto: Leticia Pérez (Ical)

La Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Clínico Universitario se ha convertido en la primera de Castilla y León en conseguir una certificación que acredita su buena gestión de los riesgos para el paciente. Concretamente, la que se otorga bajo la norma UNE 179003-2013 'Servicios Sanitarios: gestión de riesgos para la seguridad del paciente'.

Se trata de un trabajo que los profesionales de este servicio han venido realizando desde el año pasado, mediante la detección de posibles incidentes que pudieran poner en jaque la seguridad de los usuarios. Y, posteriormente, con una propuesta de mejora que en muchas ocasiones se llegó a aplicar. A veces consistente en mejorar la formación de los profesionales.

"Toda la asistencia sanitaria tiene un riesgo para el paciente, y a veces ocurren incidentes o eventos adversos, así que trabajar con esta metodología lo que implica es que hacerlo con más seguridad, al detectar áreas de riesgo donde se puede actuar de manera reactiva o proactiva", explica la responsable de este servicio, Elena Bustamante. Una doctora que ya tenía experiencia en la obtención de esta acreditación, ya que había trabajado en este sentido en el hospital que trabajaba con anterioridad.

Equipo de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Clínico Universitario de Valladolid.Equipo de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Clínico Universitario de Valladolid. - Foto: Leticia Pérez (Ical)

Para conseguirlo, la UCI creó un grupo multidisciplinar formado por médicos, enfermeros y auxiliares para detectar las principales áreas de riesgo. A partir de ahí se crearon grupos de gestión y trabajar sobre ellas. Durante este proceso se creó un sistema de notificaciones de eventos adversos, anónimo y no punitivo, que fue la base para las posteriores medidas de mejora y prevención.

"Por ejemplo, a raíz de una atención a un paciente se está trabajando en la implantación del Código Trauma, es decir, la atención urgente al paciente que ha sufrido un traumatismo, lo mismo que sucede con el Código Ictus, el Cósdigo Sepsis o el Código Ictus", añade Bustamante, quien destaca que esta "búsqueda de la excelencia" repercute en una asistencia sanitaria más segura para los pacientes.

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