Valladolid pierde más de 200 kioscos en una década

D. N.
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Hoy en día sobreviven 39 espacios de este tipo. Aspaym podrá gestionar uno cerrado que hay en la Acera Recoletos y otro que hay en el Campo Grande es para el proyecto de alquiler de bicis adaptadas de Auvasa

Kiosco situado en de la Acera Recoletos. - Foto: Jonathan Tajes

Eran un espacio de encuentro para los vecinos. Una pequeña charla sobre los titulares de los diarios o sobre el cotilleo de portada de las revistas de papel couché generaba un debate en la vía pública donde todas las opiniones eran escuchadas. El kiosco era ese punto de encuentro para el vecindario. Pero esta tradición de comprar la prensa se está perdiendo. Y eso lleva al cierre de estos puestos. Es una constante su clausura. No solo la reducción de las ventas de prensa escrita afecta a estos negocios, sino también la gran competencia que tienen en la venta de golosinas y de otros productos. Así lo explica el presidente de la Asociación Vallisoletana de Vendedores de Prensa, Juan Carlos García, que indica que cada mes cierran más kioscos. 

En el año 2013 la ciudad contaba con más de 250 puestos de este tipo en las calles. En poco más de una década han desaparecido más de 210. Y es que actualmente la cifra de kioscos abiertos es de 39, según los datos facilitados por el área de Urbanismo y Vivienda de inicio de este mes de abril. Es una sangría para el sector que busca alternativas para complementar los ingresos y evitar el cierre de estos pequeños negocios, que suelen estar en manos de familias. 

Proyectos de telefonía o de recarga de baterías para bicis o patinetes eléctricos son algunas de las propuestas que algún quiosquero tiene sobre la mesa. Pero desde la asociación indican que se están estudiando su implantación o ya les han indicado que algunas de estas ideas no son viables. 

Según estos datos del área de Urbanismo y Vivienda, hay siete kioscos cerrados. De esta cifra total, cuatro ya tienen en trámite el expediente de extinción de la concesión. Otro que estaba en la calle Constitución se retiró por las obras que hay en esta calle y otro en la calle Mirabel permanece clausurado, pero es de titularidad municipal y se trata de una edificación de tipo  prefabricada. 
No obstante, uno de estos espacios que está cerrado se va a utilizar para un proyecto solidario. En concreto, se está tramitando a Aspaym el expediente de concesión del kiosco de titularidad municipal que hay en la plaza Zorrilla, junto a la Acera Recoletos y la fuente. Se trata de un espacio acristalado y esta entidad lo usará para la venta de productos que ayudan a la financiación de sus actividades, como asegura el concejal de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Valladolid, José Ignacio Zarandona. 

Asimismo, hay otro kiosco que cambia su esencia. Está situado en el Paseo del Campo Grande y se destinará al proyecto de alquiler de bicicletas adaptadas de Auvasa. 

Peticiones

Los kioscos son concesiones a particulares para el inicio de un negocio de venta de prensa y golosinas. Y si se cierra, el Ayuntamiento inicia la extinción de la concesión y el propietario debe retirarlo del espacio público. De hecho, algunos permisos se extinguen por el paso el tiempo y, otras ocasiones, se hacen de oficio porque no se puede ocupar el espacio público sin desarrollar esta actividad. 
Zarandona indica que están recibiendo peticiones de varias entidades para usar kioscos cerrados, pero que son singulares. Es el caso de Aspaym que solicitó el situado en la Acera Recoletos. 

Asimismo, reconoce el concejal que han recibido peticiones para el uso de estos espacios, por ejemplo, para la instalación de un puesto de comida e incluso para una churrería. Pero, de momento, no se han considerado estas peticiones porque no ven que sean el lugar más adecuado para poner freidoras o planchas. No obstante, hace tiempo que no reciben este tipo de peticiones de los ciudadanos. 

Y aclara que se deben retirar de la vía pública estas casetas si están cerradas para no restar espacio a los peatones porque que no siempre están en el mejor lugar. Además, subraya que están abiertos a recibir ideas novedosas para seguir dando vida a los kioscos.

Diez actividades alrededor de un kiosco histórico

Fue por estas fechas, hace un año, cuando el kiosco de prensa de grandes ventanales y de color verde volvía a recuperar su esplendor y se colocaba en la plaza de Caño Argales. Este espacio reformado acogía de nuevo esta pequeña caseta también rehabilitada. Y es que las obras en la plaza provocaron su retirada, pero, como no hay mal que por bien no venga, este emblemático templete fue llevado a las dependencias municipales para devolverle en buen estado a la calle. Ha pasado un año, pero sigue sin uso. La Asociación de Vecinos Caño Argales ya había solicitado al anterior Gobierno local de Óscar Puente la cesión de este espacio para sumarlo a sus actividades culturales y sociales. Pero el proyecto se quedó ahí. Temen que sea vandalizado y desean evitar que sufra deterioro, una vez más. De forma que, con el cambio en la corporación municipal, la asociación de vecinos han presentado otra propuesta. Esta vez ha concretado fechas y actividades. Han entregado tanto a la Concejalía de Patrimonio como a la de Participación Ciudadana, a través de la sede electrónica, un dossier con un listado de alrededor de diez actividades y talleres para desarrollar en el entorno del kiosco de la plaza Caño Argales. Esperan que les cedan el kiosco o al menos que se abra cuando hagan esas acciones culturales.