Valladolid fija su Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en los límites de la conocida como almendra central. Este espacio está limitado por el paseo de Isabel la Católica, San Quirce, la Avenida de Santa Teresa, la calle Ramón y Cajal, Colón, Labradores, Miguel Íscar y Doctrinos, suma unos 18 kilómetros de calles transitables por tráfico rodado. Un área donde el Ayuntamiento quiere que no circulen los automóviles sin etiqueta ambiental desde el próximo 1 de enero de 2022, ni tampoco tengan la posibilidad de utilizar sus estacionamientos. De momento, es una petición del Ayuntamiento a la ciudadanía, pero a finales de 2023 se convertirá en una prohibición, que ya tendrá su correspondiente sanción. Las multas no se han fijado porque está pendiente la aprobación del plan de calidad del aire, que se realizará antes de final de año, ya que es el documento donde se delimita la zona de restricciones. También será necesaria una ordenanza municipal donde se regule el funcionamiento.
El control de accesos a la ZBE se realizará mediante un sistema de control de cámaras, con detección en tiempo real de las matrículas y envío a los centros de control. La videovigilancia se instalará en los 14 puntos de entrada a la almendra central. Además, en cada vía de entrada se pintará la calzada de unos 3 metros de largo y todo su ancho, para indicar la zona de restricción. Esta marca en el suelo, irá acompañada de la correspondiente señalización vertical aprobada por la DGT. También está previsto el despliegue de la señalización vertical en los casos en los que una vía desemboque en un acceso a la zona, por ejemplo el puente de Poniente, la calle de Chancillería, y Alonso Pesquera.
Además, el sistemas de control se completará con una web para la tramitación de las correspondientes exenciones, ya que tendrán entrada libre los residentes, Policía, Bomberos, Protección Civil, Auvasa, limpieza y recogida de residuos , otros autobuses, urgencias vía pública (agua, luz, internet..), servicios funerarios, vehículos Sacyl, grúas de rescate de vehículos, visitantes empadronados, hoteles, urgencias/consulta médica, talleres, mudanzas... Esta web gestionará todos los permisos, tanto permanentes como los temporales. También será la encargada de formular las correspondientes denuncias a los vehículos no autorizados.
Más limitaciones.
El calendario previsto en el nuevo plan del Ayuntamiento fija el 1 enero 2025 como la fecha para que ya no entren los vehículos de etiqueta B. Aunque sí lo podrán hacer los de etiqueta C. Y, finalmente, el 1 enero 2030 se limitará la circulación solo a los que tengan etiqueta Eco y Cero Emisiones. Esta limitación ya será permanente, se aplicará todos los días de la semana, sin limitación de horarios, y se calcula que puede afectar a unos 27.500 de los 136.924 vehículos censados en la capital. «Esto representa el 30% del parque móvil, pero son responsables del 50% de la contaminación», justifica la concejala de Medio Ambiente, María Sánchez. Una regulación de la que hay que excluir a los beneficiados por las excepciones. Eso sí, la ZBE también estará afectada cuando se active el Plan de Acción en situaciones de alerta por contaminación y se establezcan restricciones aún mayores al tipo de vehículos, aunque en agosto se cumplirán dos años sin que se aplique.
La Concejalía estima que la implantación de la ZBE permitiría reducir los gases de efecto invernadero y los contaminantes entre el ?30% y el ?40%, aproximadamente. Para comprobar la efectividad de la medida se instalarán, al menos, cuatro sensores completos de medida de la contaminación atmosférica. «Estos sensores se colocarán previo al inicio de la ZBE, con objeto de ver la evolución de la zona, si bien, dado su carácter experimental, no se utilizarán para la evaluación de la calidad del aire del espacio», apunta Sánchez. Pero sí se realizarán campañas de medición con un dispositivo móvil recientemente adquirido por el Consistorio.
Estas medidas restrictivas se acompañarán de otras para «dar soluciones» de movilidad en la zona, que estarán relacionadas con el transporte de mercancías y la carga y descarga en ese área, la peatonalización de algunas calles, el establecimiento definitivo del Plan Director de la Bicicleta con la inclusión de un nuevo sistema de préstamo, aparcamientos seguros, nuevos carriles bici, mejora en los viales de acceso a la zona, etc. «Todas estas acciones como hemos visto se desarrollan en el Pimussva, que complementan una actuación completa en la movilidad de la ciudad», apunta.
Fases y medidas previstas en el plan de calidad del aire
desde 1 de enero de 2022. La recomendación y petición de colaboración ciudadana para que no entren en la almendra central vehículos sin etiqueta se acompañará de otras medidas. Entre ellas, la instalación de cámaras de vigilancia y mecanismos de acceso y control. La redacción de una ordenanza para regular la zona, exenciones, mecanismos de entrada, sanciones y regulación de casos concretos como carga y descarga. Yla proyección de obras estructurales para conseguir espacios ‘amables’, recorridos paseables y campañas de fomento del comercio de proximidad.
fechas aplicación restricciones. El próximo año se estrenará con la recomendación de no entrar en la almendra central con vehículos sin etiqueta. Después de un periodo de concienciación, en el segundo semestre de 2023 está previsto que comiencen las sanciones a los vehículos que incumplan la normativa. El 1 de enero de 2025 se prohibirá la entrada a los vehículos sin etiqueta, ni los de etiqueta B, y el 1 de enero de 2030 solo podrán acceder los eco y cero.
exenciones. El borrador del nuevo plan de calidad de aire, que fija la zona de bajas emisiones, incluye las excepciones a las limitaciones de tráfico que se impondrán en la almendra central. Tendrán entrada libre los residentes, Policía, Bomberos, Protección Civil, Auvasa, limpieza y recogida de residuos, otros autobuses, los vehículos de urgencias vía pública (agua, luz, internet.), los servicios funerarios, vehículos de Sacyl, grúas de rescate de vehículos. También se contemplan excepciones para los visitantes empadronados, los clientes de hoteles, urgencias/consulta médica, los talleres y las mudanzas.
debate. El nuevo plan de calidad del aire, que se aprobará definitivamente a finales de año, se someterá a dos meses de exposición pública para generar debate ciudadano. En este sentido, el alcalde y la edil apuntaron que no significará mucho cambio para la capital porque ya se había «avanzado» mucho en este terreno con actuaciones como la VA-10 para el transporte público o las nuevas áreas estanciales. Eso sí, apuntaron que las medidas contempladas en el plan, además de las restricciones de tráfico, «cambiarán el rumbo de la ciudad». En esa línea avanzaron actuaciones de eficiencia energética, con la autogeneración de electricidad, y de descarbonización de edificios.