El número de perceptores del Ingreso Mínimo Vital (IMV) aumentaba en Valladolid el pasado mes de marzo hasta alcanzar los 5.032, 151 más que en febrero. Detrás de cada perceptor, eso sí, suele destacar el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones que hay un hogar, de ahí que también calcule la cifra total de beneficiarios en función de los miembros que residan en cada uno, y así se elevan a 15.334 en esta provincia; 3,05 beneficiarios por cada titular de IMV, concretamente.
Respecto a la cuantía media mensual de esta prestación en Valladolid, en marzo bajaba de 533,15 a 527,67 euros, aunque es la decimoquinta más alta del país (sobre un total de 50 provincias y dos ciudades autónomas) y se mantiene así por encima de la media nacional (496,01). Dentro de Castilla y León, por delante de todas en este aspecto se sitúa Palencia (530,46), seguida de Ávila (528,22) y después ya Valladolid (527,67), tras la cual van León (523,29), Zamora (498,57), Salamanca (496,87), Burgos (444,22), Segovia (382,21) y Soria (355,96).
Tampoco es la provincia vallisoletana de las que más perceptores contabilizan, teniendo en cuenta que ocupa el puesto 35 en esta cuestión pese a ser la trigésima por número de habitantes. León, por ejemplo, tiene 5.525 perceptores.
En cuanto a la cuantía media mensual resultante para cada beneficiario, teniendo en cuenta la propia cuantía del IMV y la ratio citada de 3,05 miembros por hogar, en Valladolid se sitúa en 173,16 euros, de nuevo por encima de la media española (165,37), aunque hay diez provincias que superan los 200, con Guipúzcoa (244,89), Asturias (258,36) y Vizcaya (268,54) a la cabeza.
Quién puede cobrarlo
El IMV es una prestación dirigida a prevenir el riesgo de pobreza y exclusión social de las personas que viven solas o están integradas en una unidad de convivencia y carecen de recursos económicos básicos. El perceptor debe tener al menos 23 años, o 18 si hay menores a cargo, y no ser beneficiario de pensión contributiva por jubilación o incapacidad permanente, ni de pensión no contributiva por invalidez o jubilación; y debe llevar al menos un año de residencia legal en España.
Siete de cada diez unidades de convivencia receptoras del IMV son hogares con menores, y de estos últimos, monoparentales en uno de cada cuatro casos.
En este contexto, "en línea con la protección de la infancia", el Ministerio destaca la relevancia del
complemento de ayuda para la infancia del IMV, que supone 115 euros más por hogar al mes en el caso de niños de 0 a 3 años; de 80,5 euros al mes por cada niño entre 3 y 6 años y de 57,5 euros al mes por cada menor de entre 6 y 18. A todos los efectos tiene la misma naturaleza del IMV, ya que forma parte de él. La cuantía media del complemento este mes ha sido de 67 euros.
El IMV también tiene un marcado perfil femenino. En marzo, el 66,65% de los titulares y el 53,5% de los beneficiarios son mujeres; y "el 82,3% del conjunto de titulares son de nacionalidad española", según cálculos a nivel nacional apuntados por el propio Ministerio, que sitúa en los 45 años la edad media del perceptor.