Las obras de rehabilitación del Centro Penitenciario de Valladolid harán que, tras 39 años en funcionamiento, cuente con nuevas centralitas de intercomunicación y una actualización del sistema de seguridad pasivo perimetral, con un presupuesto superior a dos millones de euros.

En este marco, la intervención afectará a las modificaciones constructivas en la estructura, tabiques, cerrajería, acabados y otras actuaciones necesarias para el correcto funcionamiento de la prisión como la rehabilitación de las cubiertas, la reforma integral de la cocina, de la red de agua fría y caliente, del saneamiento; de la instalación de detección de incendios; el acondicionamiento de polideportivo y, además, la instalación de líneas de vida en los tejados para hacer más seguras las labores de mantenimiento.

Así, informa Europa Press, las obras de rehabilitación suponen una inversión de más de dos millones de euros y las gestiona la empresa pública SIEPSE -Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios y de la Seguridad del Estado-, dependiente de la Dirección General de Patrimonio del Estado del Ministerio de Hacienda, si bien opera bajo la planificación del Ministerio del Interior.

En este marco, el subdelegado del Gobierno en Valladolid, Jacinto Canales, acompañado por el director del Centro Penitenciario de Valladolid, Carlos Blanco, ha asistido este martes a la celebración del Día de La Merced, patrona de Instituciones Penitenciarias.

Jacinto Canales ha agradecido el empeño de todas las personas que trabajan para lograr la reinserción social de las personas recluidas, como son los funcionarios de prisiones, profesionales especializados, agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, voluntarios que prestan su apoyo, ONGs y asociaciones que colaboran en diversos programas, así como entidades públicas y privadas.

El subdelegado del Gobierno ha destacado el "esfuerzo" de equipo que supone mantener una oferta "tan amplia" de programas y actividades para lograr el objetivo de la reinserción social y laboral de los internos, una vez cumplan sus penas.

Medalla de bronce al mérito penitenciario

En este acto, una funcionaria del centro ha recibido la Medalla de Bronce al Mérito Penitenciario "por su destacada trayectoria profesional".

Esta mujer ha sido funcionaria de Prisiones desde 1991 y funcionaria de carrera desde 1993, cuando tomó posesión en el Centro Penitenciario de Ávila. Actualmente forma parte de la plantilla del Centro Penitenciario de Valladolid desde 2017 y sus compañeros la aprecian como una extraordinaria colaboradora, tanto por su talante personal como por su actitud positiva y disposición para ayudar a los demás".

Además, los funcionarios de la prisión que cumplen 25 años de servicio en Instituciones Penitenciarias también han recibido menciones honoríficas, por su dedicación profesional.

Plantilla y recursos

Así, el Centro Penitenciario de Valladolid, en funcionamiento desde 1985, cuenta con una plantilla de 289 trabajadores -269 funcionarios y 20 laborales- y una población reclusa de 501 personas, de las que 48 son mujeres, en la actualidad.

Del total de internos, 59 residen en el Centro de Inserción Social Máximo Casado Carreras -en honor al funcionario de prisiones asesinado por ETA en el año 2000-, dependiente del centro penitenciario, que alberga a internos en avanzado proceso de reinserción, que cumplen su pena en régimen abierto.

Además, otras 21 personas permanecen bajo control telemático mediante pulseras, en sus domicilios.

Por otra parte, el Centro de Inserción Social también atiende a 69 internos más con la condena suspendida por libertad condicional y cuatro en libertad vigilada.

El CIS también alberga el servicio de gestión de penas y medidas alternativas que en lo que va de año lleva gestionadas más de 500 ejecutorias.

Oferta

El Centro Penitenciario de Valladolid ofrece un "buen" número de posibilidades para buscar una reinserción real de la población reclusa, tras su internamiento.

Así, mantiene programas destinados a internos condenados por violencia de género, conducta violenta, agresión sexual o pornografía infantil, así como otros para superar adicciones -alcoholismo, toxicomanía, ludopatía, adicciones sociales- o los destinados a ayudar a colectivos especiales como las personas con discapacidad, enfermedad mental, programas para desarrollar las habilidades sociales en el caso de los internos más jóvenes o para ayudar a internos que carecen de una red social en el exterior.

Así, según la delegación del Gobierno en Castilla y León, "el área educativa es esencial para la vida en el exterior dado que aumenta las posibilidades de reinserción social y laboral".

En este terreno el centro ofrece alfabetización, conocimientos básicos, castellano para extranjeros, inglés, informática, preparación para obtener el grado en Educación Secundaria, Bachillerato y acceso a la Universidad para mayores de 25 años.

En este momento hay además siete reclusos matriculados en la UNED para obtener los grados en derechos, periodismo, psicología y matemáticas.

En el Centro Máximo Casado Carreras se ofrecen también itinerarios individualizados para la integración sociolaboral, atención a población extranjera, búsqueda de empleo, así como formación en justicia restaurativa, participación ciudadana o en responsabilidad y cuidado para hombres.

Además, hay talleres de lectura, danza, teatro, terapia asistida con animales, artesanía en madera, cuero y cerámica.

Finalmente, el área deportiva cuenta con una escuela de atletismo, la escuela de fútbol de la Fundación Real Madrid, la de Rugby, del club deportivo El Salvador y Cáritas, y el equipo de balonmano que juega en la liga provincial federada, a cargo del Atlético Balonmano Valladolid. En breve, se va a iniciar también una actividad a cargo de la Fundación Eusebio Sacristán de 'Fútbol andando'