CCOO y UGT han reunido este jueves a más de 50.000 personas en Madrid, según los datos de la organización, para exigir a la patronal una subida de los sueldos de acuerdo al incremento de la inflación, bajo el lema Esta crisis no la paga la clase trabajadora. Salario o conflicto.

A pesar de la lluvia que acompañó el comienzo de la manifestación, sobre las 10:30 de la mañana, los sindicatos han recorrido el centro de Madrid en tres columnas, que han partido desde la Plaza de España, Atocha y Puerta de Toledo, para confluir poco a poco en la Plaza Mayor.

Durante todo el recorrido, los manifestantes han ido animados por batucadas, con banderines de CCOO y UGT y banderas de las distintas comunidades autónomas, mientras coreaban proclamas como Si esto no se apaña, caña, caña, caña, o pancartas en las que se podía leer ¡Es inflación!, grita el ladrón o Stop carestía, robo día a día.

50.000 personas 'toman' Madrid para exigir una subida salarial - Foto: Alejandro Martínez Vélez

La primera columna ha llegado algo antes de las 11:45 horas, y han esperado al resto de los manifestantes, delegados y trabajadores de todo al país, al ritmo de la música y recordando los distintos convenios sectoriales en negociación.

Los secretarios generales de CCOO, Unai Sordo, y el de UGT, Pepe Álvarez, y las secretarias generales de Madrid de ambos sindicatos, Paloma López y Marina Prieto, respectivamente, han encabezado otra de las tres columnas y han llegado a la Plaza Mayor pasadas las 12:00 horas.

Álvarez ha comentado ante los medios que esta movilización supone "un punto de inflexión" y ha advertido a la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) de que las manifestaciones van a continuar "si no se sienta a negociar los convenios colectivos con mejoras salariales".

50.000 personas 'toman' Madrid para exigir una subida salarial - Foto: Alejandro Martínez Vélez

Para el secretario general de UGT, esta ha sido "una concentración de fuerza", que espera que sirva de toque de atención para aquellos "poderes económicos que no dan la cara".

Aunque la manifestación era una protesta contra la patronal, Álvarez también ha recordado al Gobierno que el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) debe subir en 2023 a 1.100 euros.

Por su parte, Sordo ha calificado la manifestación de hoy como una "reivindicación histórica" en el país. "Se están rompiendo muchos de los mantras neoliberales con los que nos venían intoxicando la cabeza desde hace muchas décadas. Estamos aquí para ir rompiendo mantras", ha recalcado Sordo ante los medios.

El secretario general de CCOO ha subrayado que los sindicatos no van a tolerar "que esta crisis de precios la vuelva a pagar la clase trabajadora" y ha exigido "corresponsabilidad" a la CEOE.

Al igual que Álvarez, Sordo también ha apelado al papel del Gobierno en esta crisis y ha ampliado el lema de la manifestación a "Reparto o conflicto", para exigir al Ejecutivo una "política fiscal más ambiciosa" para "salir de una forma distinta de esta crisis de precios".

"Conflicto servido" si no hay acuerdo

Ya en el escenario, delante de las más de 50.000 personas que han acudido a la Plaza Mayor, Sordo y Álvarez han lanzado sus mensajes contra la patronal, para instar a los empresarios a volver a la mesa del Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), parada desde comienzos de mayo, y exigir una subida salarial que amortigüe el alza de precios.

"La CEOE tiene que elegir: o hay salario o hay conflicto; o son capaces de volver a la mesa de negociación o el conflicto estará servido en todo el país. Esta manifestación de hoy no es el final de nada. La lucha va a continuar convenio a convenio", ha anunciado Álvarez.

El secretario general de UGT se ha mostrado optimista con el proceso de movilizaciones que comenzaron los sindicatos el mesa pasado y ha asegurado que están "empezando a ganar esta lucha".

Álvarez también ha aludido a las previsiones de beneficios récord en 2022 para las empresas y les ha reclamado que repartan esas ganancias con los trabajadores a través del salario. "Lo hacemos por justicia social, porque es justo, porque es razonable", ha agregado.

Por su parte, Sordo ha reprochado a la patronal su actitud "avariciosa, cegata y cortoplacista" por aspirar a "que la crisis la paguen los trabajadoras".

"No lo vamos a tolerar de forma pacífica", ha alertado el secretario general de CCOO desde el escenario, acompañado de los gritos de 'Salario o conflicto' de los asistentes.

Sordo también ha afeado a los empresarios su falta de responsabilidad en esta crisis y ha señalado que la CEOE solo firmó los acuerdos tripartitos durante la pandemia "porque había un reguero de dinero público del que apropiarse".

El secretario general de CCOO también ha precisado que se están firmando convenios con subidas salariales en las empresas, lo que demuestra que existen "márgenes empresariales" para afrontar un aumento de salarios sin lastrar el tejido productivo español.

"No es posible una subida salarial del 8% o del 9%, aquí y ahora en todos los sectores (...). Somos realistas y sabemos que no se pueden hacer en todos los sectores, (los convenios) tienen que ir acompañados de cláusulas de revisión y de garantía salarial", ha reconocido.

"Homeopatía económica"

Los secretarios generales de los dos sindicatos han criticado en su intervención la bajada de impuestos como respuesta a la crisis que propugnan algunas comunidades autónomas. Ambos han pedido no caer en esa "gran trampa", que en la práctica se traducirá en un recorte de servicios públicos.

"De nada nos sirve mejorar los salarios si cuando tenemos necesidad de ir a la universidad, el Estado no nos respalda. Por eso es tan importante el respaldo de los servicios públicos", ha dicho Álvarez.

Para Sordo, la bajada de impuestos no es más que "homeopatía económica", que solo sirve para que "los trabajadores paguen por doble vía la crisis".

"No está nada escrito, la lucha mueve montañas, la historia está por escribir. Los mensajes cenizos son mensajes reaccionarios. Todo depende de cómo nos organicemos. ¡Viva la clase trabajadora!, ¡Viva la UGT!, ¡Viva CCOO!, ¡Viva la lucha de la clase obrera!", ha coreado Sordo antes de que comenzara a sonar la Internacional con la que ha concluido la manifestación.