El Pucela 'regala' los puntos en el Pizjuán

M.B.
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El Real Valladolid firma un encuentro serio en Sevilla, manchado por varios errores groseros en la salida del balón. Dos de ellos, al filo del descanso y en el minuto 85, permitieron a los hispalenses quedarse con los tres puntos (2-1)

Cömert, en el Sevilla-Real Valladolid. - Foto: Efe

El Real Valladolid tenía que mejorar en las dos áreas para sumar sus primeros puntos a domicilio. Y quizá lo hizo este martes en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Pero no fue suficiente para irse de Nervión con una sonrisa. La razón es clara: los errores se pagan. Y más si se repiten. El Pucela 'regaló' el triunfo al Sevilla porque tuvo varias pérdidas groseras en la salida del balón. Dos de ellas, una al al filo del descanso y otra en el minuto 85, permitieron a los hispalenses quedarse con los tres puntos. De nada vale la mejoría si se sigue jugando al ritmo de Segunda.

Paulo Pezzolano introdujo seis variaciones respecto al último partido (0-0 ante la Real Sociedad), con la entrada de los centrales David Torres y el suizo Eray Cömert, los medios Kike Pérez y Mario Martín -éste tras cumplir sanción-, y los atacantes Marcos André y el senegalés Amath Ndiaye.

El encuentro comenzó con un fuerte golpe sobre Mario Martín y un remate de cabeza de Marcos André en el minuto 4 en la falta hecha sobre el medio. El testarazo se fue alto sin peligro. Seguido de una rápida amarilla a Pezzolano, algo que empieza a ser habitual en los partidos de los pucelanos. Eso sí, el primer susto real lo dio el cuadro local, con una contra tras un córner a favor del Pucela y un zurdazo final de Saúl Ñíguez, que salió rozando el larguero. Era el minuto 9 para el 10 y todavía estaban los dos equipos asentándose.

De hecho, pareció que, en ese inicio, el Real Valladolid estaba cómodo. Incluso controlando más el balón. O queriendo hacerlo.

Pero un error de Mario Martín estuvo a punto de costarle el primero al Pucela, con una pérdida ante Saúl y un despeje de Lucas Rosa, providencial, que fue revisado por el VAR. Precisamente al medio se le veía demasiado dubitativo en los pases, perdiendo varios balones claros; además de muy intenso en los cortes, en exceso en algunas ocasiones.

El caso es que a la media hora de juego llegó mejor el Pucela, presionando cuando debía y teniendo posesión aunque sin llegada. Le faltaba un poco más de colmillo en un partido en el que el Sevilla se le notaba con dudas. Lo pudo enseñar Marcos André, pero estaba en fuera de juego en el 36, aunque luego no resolvió bien tras irse de Marcao en velocidad. 

El problema parecía estar más en la salida del balón. No parecía, estaba. En el minuto 39, Cömert, sin nadie presionando, le regaló un balón a Peque, que estuvo a punto de aprovechar Iheanacho, que la envió alto con Hein descolocado.

Pero como no hay dos sin tres. Y el Pucela regaló otra salida del balón. En este caso en la banda derecha, Kike Pérez esperó a que le llegase un balón, como si no hubiese rivales, como si no fuese con él. Lo hizo tan claro que llegó Carmona, le robó el cuero para presentarse solo y central... lo que pasó después... ni con tres repeticiones de televisión. Centros, remates, golpeos... y nadie de los de Pezzolano fue capaz de despejar. Los sevillistas, intensos; los vallisoletanos, dudosos, timoratos... y así solo podía pasar una cosa. Centro final de Lukébakio y remate entre Peque y David Torres. El colegiado le dio el tanto al defensa, y al descanso se llegó con un jarro de agua fría y el 1-0 en contra. 

En el descanso, el técnico uruguayo hizo un cambio, Iván Sánchez por Amath. Aunque la disposición parecía la misma. 

Lo que cambió, por fin, fue el acierto en ataque. Al menos, en la primera ocasión que tuvieron los pucelanos. Y de la mano de dos de los protagonistas de errores groseros en la primera parte, Mario Martín y Kike Pérez. El primero, con un giro lleno de calidad y velocidad cocinó la jugada. El segundo aprovechó la asistencia de su compañero golpeando con el interior, para cruzar el cuero ante Nyland, con un pequeño toque de Carmona. Era el minuto 56 y en los dos siguientes, el Pucela pudo golpear de nuevo.

Primero tras el saque de centro y un robo de Marcos André, que el '9' no aprovechó porque prefirió recortar a disparar. Y luego, en el 58, con un lanzamiento de falta de Iván Sánchez, que buscó la escuadra en una falta, y se encontró con la manopla de Nyland.

Pezzolano ya tenía pensados los cambios y no reculó, metiendo a Latasa y Moro por Kike Pérez y Machis, colocando un once más ofensivo.

Y el encuentro enloqueció. Eso no terminó de sentarle bien al Real Valladolid, que hasta entonces estaba controlando más. Así se vio en el minuto 68, de nuevo en una contra del Sevilla tras un saque de esquina de los pucelanos. Lukébakio y Ejuke se encontraron con un dos para dos, que finalizó el segundo, haciendo lucirse de nuevo (como el sábado ante la Real Sociedad) a Hein, volando para evitar el 2-1.

Así que en el 73, Pezzolano decidió recolocar a su equipo, metiendo a Meseguer por Marcos André. Y el Real Valladolid volvió a estar cómodo. 

El encuentro entró en la recta final con la tensión del 1-1. Tensión que se vio reflejada en el minuto 83, con un centro que bajó Peque con el pecho, ante la pasividad de la defensa y el bloque de Gudelj a los dos centrales. El delantero no hizo el 2-1 porque Hein volvió a hacerse grande.

Pero el Pucela 'quería' regalar más. El empate no le servía (entiéndase la ironía). Y de nuevo ejecutó otra pérdida más. De nuevo cerca del área de Hein. De nuevo por lentitud. Esta vez Meseguer, ante la presión de Peque, se la dio a Ejuke que entró en velocidad y cruzó para poner por delante a los locales. Minuto 85. Quedaba tiempo. Y más cuando el Sevilla se quedaba con uno menos en el 89, por cortar una penetración de Sylla, después de haber visto la primera amarilla por cortar otra de Latasa. 

El añadido eran siete y en el primero, Carmona le quitó el remate de cabeza a Meseguer. En el segundo no llegó bien Latasa tras peinar Sylla. Encerró al Sevilla pero el Pucela no encontró el camino a pesar de estar con uno más. Cuarta derrota seguida lejos de Zorrilla. Y ésta con unos errores evitables.

Ficha técnica:

2 - Sevilla:
Nyland; Carmona, Badé, Marcao, Barco (Montiel, m.91); Saúl (Agoumé, m.53), Gudelj, Peque (Kike Salas, m.91); Jesús Navas (Ejuke, m.62), Iheanacho (Suso, m.62) y Lukébakio.

1- Real Valladolid: Hein; Luis Pérez, Cömert, David Torres, Lucas Rosa; Machís (Raúl Moro, m.57), Kike Pérez (Latasa, m.57), Juric (Sylla, m.86), Mario Martín; Amath (Iván Sánchez, m.46) y Marcos André (Meseguer, m.73).

Goles: 1-0, M.45: David Torres, en propia puerta. 1-1, M.56: Kike Pérez. 2-1, M.85: Ejuke.

Árbitro: Juan Luis Pulido Santana (Comité Canario). Expulsó por protestar en el minuto 88 a un miembro del cuerpo técnico del Valladolid y por dos amarillas al sevillista Marcao, que las vio en los minutos 78 y 90. Además, amonestó por los visitantes a su entrenador, Paulo Pezzolano (m.06), y a Marcos André (m.33), Lucas Rosa (m.37), Juric (m.82) y David Torres (m.95) y a los locales Gudelj (m.21), Lukébakio (m.66) y Peque (91).

Incidencias: Partido de la séptima jornada de LaLiga EA Sports disputado en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán ante 35.292 espectadores.