Los voluntarios de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) han hallado a lo largo de esta mañana los restos óseos de un hombre de unos 50 años de edad en el cementerio de Mojados, que podrían ser los del pastor Pedro de la Calle, asesinado por pistoleros falangistas en esta localidad en 1936 cuando tenía 48 años. De este modo, terminarían estos trabajos que se iniciaron ayer en el camposanto.
Después de que los trabajos se dilataran este martes por el tiempo dedicado a la retirada de la gran cantidad de arena que se había arrojado en la zona durante todos estos años, finalmente se ha dado con los restos humanos que los voluntarios esperaban, muy por debajo de los 60-70 centímetros de profundidad.
Tras encontrar el personal de la ARMH este martes "muchas y enormes hierbas y mucha arena traída de algún panteón, cuyo excedente lo echaron aquí", Pedro de la Calle, de confirmarse que es él, se encontraba en un espacio de cinco por cinco metros destinado "cementerio civil". A partir de ahora se inician los trabajos de identificación a través de un análisis genético, gracias a la presencia de un nieto, que podría extenderse durante varios meses.
Pedro de la Calle nació en Alcazarén (Valladolid) el 23 de febrero de 1888. Estaba casado con Romana Burgos, con la que tenía dos hijas: Ángela y Lucía. Era pastor, socialista y miembro de la Casa del Pueblo de Mojados, donde residía. Su hija Ángela recordaba a la ARMH, antes de morir, que la primera vez que fue detenido lo trasladaron al calabozo del Ayuntamiento, lugar en donde recibió una paliza. La segunda detención se produjo cuando estaba en su domicilio escogiendo garbanzos junto a sus dos hijas. En esa ocasión fue trasladado caminando desde el terreno de labranza hasta el pinar, lugar en donde fue colgado de un pino después de sufrir vejaciones y mofas por parte de sus ejecutores el 25 de agosto de 1936.
En su certificado de defunción figura como causa de la muerte una "detención ilegal con ejecución extrajudicial, congestión y asfixia". Según recuerda la familia su cuerpo apareció ahorcado en un pinar cercano tras ser asesinado por falangistas de Alaejos, Ataquines y Mojados.