La Junta licita la restauración de la laguna de Tamariz

D.V.
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La inversión total estimada asciende a 189.105 euros, que será financiada con cargo a los fondos Next-Generation

Laguna de Tamariz de Campos. - Foto: Ayuntamiento Tamariz

La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio licita la restauración de la laguna de Tamariz mediante la eliminación de la vegetación leñosa no asociada al humedal, además de retirar la materia vegetal tanto de la cubeta lagunar como del canal de riego. También incluye el acondicionamiento de la infraestructura hidráulica de abastecimiento de agua a dicha zona húmeda, de manera que permita una mejor conservación de esta masa de agua y de su ecosistema.

En un comunicado que recoge Ical, el Ejecutivo informó de que la laguna se ubica en la localidad vallisoletana que le da nombre. Se trata de una zona húmeda de "innegable valor natural", que forma parte de la ZEPA La Nava-Campos Sur y coincide con el monte de utilidad pública 159. Además, está propuesta para su inclusión en el Catálogo de Zonas Húmedas de Interés Especial de Castilla y León.

Este humedal se encuentra enclavado Tierra de Campos, en un lugar privilegiado, al lado del río Sequillo y del Canal de Castilla, muy cerca de la esclusa séptima. La inundación se producía de forma natural cuando las avenidas invernales y primaverales desbordaban el río Sequillo y encharcaban los pastizales del valle. 

Sin embargo, su desecación como consecuencia de los diversos dragados del río Sequillo en las décadas de los años 60 y 70, que transformaron su cauce en un canal dragado y rectificado con motas en ambas orillas con el fin de evitar inundaciones durante sus crecidas, cambió su régimen hídrico. De este modo, el humedal perdió su capacidad de inundación natural al desconectarse de la llanura del río Sequillo, transformándose en un pastizal húmedo que era encharcado y aprovechado por los ganaderos para obtener buenos pastos y forraje, gracias al agua procedente del Canal de Castilla.

Dada la proximidad del Canal y la presencia de una infraestructura hídrica que permitía incorporar agua a los pastizales, la Junta de Castilla y León compró en el año 2007 la parcela situada más al sur con una superficie de 18,5 hectáreas. Esta adquisición culminó en el año 2017 con su declaración de utilidad pública e inclusión en el Catálogo de Montes de Utilidad Pública de la provincia de Valladolid, con el número 159. 

Así, durante los primeros años se realizó una restauración inicial (motas, azud, isletas,…) gracias a la colaboración de varias administraciones: autonómica, local y estatal, esta última, a través de la Confederación Hidrográfica del Duero. Se logró un aumento de la superficie inundada y del periodo de inundación durante unos años, con un régimen hídrico que imitaba el ciclo natural de inundación de un humedal mediterráneo, alternando periodos de inundación y de estiaje.

Durante esos primeros años, la recuperación del humedal fue un "éxito", especialmente debido a su ocupación por una "abundante y rica" comunidad de aves, aunque también por parte de las comunidades de flora acuática y otra fauna, como los anfibios y los invertebrados acuáticos. Algunas de las especies más relevantes detectadas por su estado de conservación desfavorable fueron el carricerín cejudo o emblemáticas como el ánsar común.

Sin embargo, la evolución de la vegetación en un humedal restaurado de estas características fue transformando la zona húmeda en un lugar menos diverso, según la Junta. Debido a los procesos de eutrofización y colmatación, el humedal se ha convertido en una "extensión monoespecífica de vegetación helofítica de alto porte, muy densa y homogénea, que impide el desarrollo de una biodiversidad variada de flora y fauna que caracterizaría a un humedal bien conservado y gestionado".

Con el objetivo principal de restaurar y recuperar el humedal de Tamariz de Campos, la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio licita la restauración hidrológica, ya que la apertura de láminas de aguas abiertas sin vegetación palustre permitirá diversificar el paisaje de la laguna, creando un hábitat más heterogéneo, lo que contribuirá a mejorar sus condiciones para la presencia de aves acuáticas y otras especies asociadas a humedales que precisan de la existencia de láminas de aguas abiertas y que actualmente no encuentran estas condiciones en la laguna, además de mejorar la mitigación y adaptación frente al cambio climático. Para ello se realizarán trabajos en dos líneas de acción:

Restauración de la laguna

Se eliminará la materia vegetal de la superficie de la laguna mediante un desbroce con retroexcavadora de la biomasa acumulada sobre el suelo en una superficie de 5,71 hectáreas. También, se procederá a un decapado mecanizado del terreno y en el entorno lagunar se apearán la totalidad de los pies emergentes de frondosas no asociadas a la laguna.

Además, se contempla el mantenimiento de las infraestructuras hidrológicas que permitían su inundación o reversión de aquellas que permanezcan de antiguos intentos de desecación, como canales o drenajes que impiden su inundación. Además, se realizarán labores de limpieza del canal que realiza el aporte de agua hacía la laguna, se acondicionarán las compuertas existentes, se llevará a cabo la retirada del cerramiento ganadero en mal estado y se sustituirá por uno nuevo más adecuado.

Medio Ambiente indicó que es un proyecto "de envergadura y de gran interés", que tiene un plazo de ejecución de seis meses, realizándose las actuaciones durante la anualidad 2025, y que cuenta con la financiación de los fondos Next-Generation EU. Una vez finalizado habrá conseguido mejorar la conectividad funcional de varios humedales de Tierra de Campos: La Nava, Boada, Pedraza o los humedales asociados al Canal de Castilla, para favorecer así la expansión de especies de flora y fauna actualmente amenazadas de este territorio -avetoro, garza imperial, carricerín cejudo- que encuentran en estos hábitats un entorno apropiado en algún momento de su ciclo de vida. 

Además, se ampliará el conocimiento de la biología y la problemática de conservación de las especies prioritarias existentes en los humedales de la Tierra de Campos, sin olvidar su contribución a la mitigación del cambio climático o la mejora de la percepción social de los humedales en la sociedad en general y en el mundo rural en particular.