Pezzolano: "Lo de Kenedy no era contra el árbitro"

M.B.
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El entrenador del Real Valladolid, Paulo Pezzolano, explica que la discusión del atacante brasileño, que fue expulsado por roja directa en el banquillo, era con un compañero y no iba dirigida al colegiado

Pezzolano, en la Copa del Rey. - Foto: realvalladolid.es

El Real Valladolid perdió en la Copa y puede perder a Kenedy en la Liga. El brasileño vio la roja directa al final del encuentro cuando estaba en el banquillo. Aunque Pezzolano explicó, en la sala de prensa, que sus protestas no iban dirigidas al colegiado: "No, no era evitable la roja. Él discutió con un compañero por una jugada que estaba dentro del campo y el árbitro le vino a él como si hablase con él. No fue nada contra el árbitro, se vio claro pero el árbitro lo tomó como si era contra él".

"Después en los bancos pasaron cosas que no deberían pasar, pero pasan pero no hubo nada de más", añadió sobre lo ocurrido entre los dos banquillos al término del duelo copero.

Del encuentro, el técnico también habló, resumiendo con un "hicimos muy buen partido. Contento por estos jugadores que vienen participando poco en la Liga y obviamente jugar 90 minutos así ante gran equipo no iba a ser fácil". Analizando así el choque: "Estamos eliminados porque jugamos ante un gran equipo, con muchas variantes, con muy buenos jugadores. Sabíamos que nos tocaba el equipo más duro que nos podía tocar en esta fase. El partido creo que fue muy parejo. En el primer tiempo tuvimos chances que podíamos haber aprovechado y el Espanyol, en dos transiciones, por errores nuestros, las aprovechó y ahí tuvo la ventaja. Y en el segundo tiempo, ellos estaban muy bien posicionados, no había espacios. El rival juega y no nos permitió. Nos pudimos a tiro y nos faltó un gol más para llegar a la prórroga".

No se mostró preocupado el uruguayo por la falta de acierto de sus jugadores: "Lo bueno es tener las oportunidades. Estamos tranquilos y ahora enfocarnos bien en el campeonato y lograr el objetivo más importante, el ascenso". Y aseguró que, pese a que en la segunda parte pareció que su equipo bajaba las prestaciones, no vio "perdido" el partido: "Lo tuvimos ahí para empatar hasta lo último. Pero tenemos un plantel corto y hay que cuidar quien entra y sale. Le venían bien los minutos a los jugadores para ponerse a ritmo porque vamos a necesitar a todos. Traté de manejar los tiempos para compartir minutos y estar todos bien para el sábado".